El derecho se entiende hoy como una herramienta idónea para producir cambios en las sociedades y atender las necesidades y desafíos modernos, lo cual era casi impensable hace algunos años; se concibe como un medio para formar profesionales, pero, ante todo, abogados que son conscientes de su rol transformador en un contexto social con amplias necesidades. Por ello, la preocupación actual de las universidades y organizaciones sociales en el mundo, es formar líderes propositivos, apropiados de su papel como ciudadanos, con gran sentido social y de pertenencia, con destacadas habilidades para incidir en la formación de leyes, sentencias y políticas públicas, y resolver problemas cotidianos de grandes y pequeñas comunidades y emprender litigios a lo largo y ancho del mundo.
Así, las universidades han empezado a actualizar sus currículos y las formas de enseñar el Derecho, implementando nuevos modelos pedagógicos que brindan a los futuros profesionales elementos necesarios para responder a las necesidades de su contexto social y del mundo moderno. En este libro, profesores de América Latina y España reflexionan alrededor del trabajo ProBono, la educación legal clínica y el litigio estratégico, como herramientas para la defensa del interés público, la transformación social, el acceso a la justicia de los grupos vulnerables y la protección de los derechos humanos.
Así, las universidades han empezado a actualizar sus currículos y las formas de enseñar el Derecho, implementando nuevos modelos pedagógicos que brindan a los futuros profesionales elementos necesarios para responder a las necesidades de su contexto social y del mundo moderno. En este libro, profesores de América Latina y España reflexionan alrededor del trabajo ProBono, la educación legal clínica y el litigio estratégico, como herramientas para la defensa del interés público, la transformación social, el acceso a la justicia de los grupos vulnerables y la protección de los derechos humanos.