El cambio climático ha generado la movilización de la opinión pública internacional demandando de los gestores públicos la toma de medidas adecuadas para atenuarlo y reducir sus efectos.
Entre estas medidas, el Protocolo de Kyoto, como expresión operativa de la Convención de Cambio Climático, ha establecido una serie de mecanismos de mercado destinados a estimular la reducción de emisiones.
Entre estos mecanismos, el MDL o "Mecanismo de Desarrollo Limpio" configura un inteligente procedimiento internacional que apunta a la implementación de proyectos de reducción de emisiones en los países en desarrollo con financiamiento de empresas y gobiernos de los países desarrollados, los que pueden imputar las reducciones obtenidas mediante estos proyectos, en forma adicional, a su balance de emisiones.
El costo más reducido que demanda la reducción de emisiones en países en desarrollo resulta beneficioso para empresas y países desarrollados y a la vez permite a los países en desarrollo financiar proyectos que de otra forma serían inviables. Los efectos de cara al clima global, por su parte, son exactamente iguales.
Si bien el Protocolo de Kyoto debe rediscutirse para el período que comienza en el 2012, el éxito del Mecanismo de Desarrollo Limpio aconseja proyectarlo por nuevos períodos, facilitando el procedimiento para su aprobación.
Entre estas medidas, el Protocolo de Kyoto, como expresión operativa de la Convención de Cambio Climático, ha establecido una serie de mecanismos de mercado destinados a estimular la reducción de emisiones.
Entre estos mecanismos, el MDL o "Mecanismo de Desarrollo Limpio" configura un inteligente procedimiento internacional que apunta a la implementación de proyectos de reducción de emisiones en los países en desarrollo con financiamiento de empresas y gobiernos de los países desarrollados, los que pueden imputar las reducciones obtenidas mediante estos proyectos, en forma adicional, a su balance de emisiones.
El costo más reducido que demanda la reducción de emisiones en países en desarrollo resulta beneficioso para empresas y países desarrollados y a la vez permite a los países en desarrollo financiar proyectos que de otra forma serían inviables. Los efectos de cara al clima global, por su parte, son exactamente iguales.
Si bien el Protocolo de Kyoto debe rediscutirse para el período que comienza en el 2012, el éxito del Mecanismo de Desarrollo Limpio aconseja proyectarlo por nuevos períodos, facilitando el procedimiento para su aprobación.