El viento soplaba en la peor dirección para Judith, siempre se enamoraba de personas que no estaban bien dispuestas para una relación sin cortapisas o sin condiciones. Tal vez estaba marcado que sentía atracción por las contradicciones o por superar su propia inseguridad atrayendo relaciones que no le permitían desbloquear sus miedos. Accede a tener una experiencia mística en una escuela budista para tener paz, cuando descubre la rivalidad que siente esta escuela por el psicoanálisis. En ésta se trata de confrontar un dilema o conflicto familiar hurgando y exacerbando todavía más el subconsciente, mientras que en la escuela oriental se trata de contrarrestar el problema desde la raíz convirtiendo al inconsciente en un espejismo de nuestro ego. Con tanta energía interior llega un momento en que ella consigue estallar y salir de su nido y su propio conflicto personal y familiar, donde su madre y su hermana y su mejor amiga también arrastran sus propios problemas. Con el cuerpo entrecortado la brisa sopla sobre las superficies de las charcas de luz y el rocío danza en lo alto de las flores y las hojas convierten en un mosaico de flores el jardín adyacente, en una historia entre Barcelona y Mánchester, que se ve al trasluz de la gran fuerza y evolución personal de Judith.
Sí, era la eterna renovación, el incesante alzarse y caer, caer y alzarse otra vez. Y se alzaba este retomado temor como rocío al recomenzar la vida otro día.
RESEÑA en Google:
"He terminado de leer tu novela EL ROCÍO DANZABA EN LO ALTO DE LAS FLORES. ¡Enhorabuena! Ciertamente es una obra distinta a las anterior pero con el personalísimo e inconfundible sello de la escritora".
Áurea-Vicenta González, escritora
Sí, era la eterna renovación, el incesante alzarse y caer, caer y alzarse otra vez. Y se alzaba este retomado temor como rocío al recomenzar la vida otro día.
RESEÑA en Google:
"He terminado de leer tu novela EL ROCÍO DANZABA EN LO ALTO DE LAS FLORES. ¡Enhorabuena! Ciertamente es una obra distinta a las anterior pero con el personalísimo e inconfundible sello de la escritora".
Áurea-Vicenta González, escritora