Una solución creativa e innovadora al problema de la inducción, basada en la teoría de conceptos de Ayn Rand.
Inspirado por un ciclo de conferencias de Leonard Peikoff, y expandiendo sus ideas, David Harriman presenta una respuesta fascinante al problema de la inducción, es decir, a la cuestión epistemológica de cómo podemos determinar la validez de las generalizaciones inductivas.
Ayn Rand presentó su revolucionaria teoría de conceptos en el libro Introducción a la Epistemología Objetivista. Cuando el Dr. Peikoff profundizó en el razonamiento inductivo, buscó a David Harriman, un físico que es también profesor de filosofía, por su experto conocimiento sobre el proceso del descubrimiento científico.
Aquí, Harriman presenta el resultado de una colaboración entre científico y filósofo. Empezando por una discusión detallada sobre el papel que juegan las matemáticas y la experimentación en la validación de las generalizaciones en física, y analizando los razonamientos de científicos como Galileo, Kepler, Newton, Lavoisier y Maxwell, Harriman identifica con maestría el método por el cual descubrimos las leyes de la naturaleza. Refutando el escepticismo epidémico en la actual filosofía de la ciencia, Harriman aporta evidencias demostrables del poder de la razón, y acaba argumentando que la filosofía es, de por sí, una ciencia inductiva: la ciencia que le enseña al científico cómo ser científico.
Inspirado por un ciclo de conferencias de Leonard Peikoff, y expandiendo sus ideas, David Harriman presenta una respuesta fascinante al problema de la inducción, es decir, a la cuestión epistemológica de cómo podemos determinar la validez de las generalizaciones inductivas.
Ayn Rand presentó su revolucionaria teoría de conceptos en el libro Introducción a la Epistemología Objetivista. Cuando el Dr. Peikoff profundizó en el razonamiento inductivo, buscó a David Harriman, un físico que es también profesor de filosofía, por su experto conocimiento sobre el proceso del descubrimiento científico.
Aquí, Harriman presenta el resultado de una colaboración entre científico y filósofo. Empezando por una discusión detallada sobre el papel que juegan las matemáticas y la experimentación en la validación de las generalizaciones en física, y analizando los razonamientos de científicos como Galileo, Kepler, Newton, Lavoisier y Maxwell, Harriman identifica con maestría el método por el cual descubrimos las leyes de la naturaleza. Refutando el escepticismo epidémico en la actual filosofía de la ciencia, Harriman aporta evidencias demostrables del poder de la razón, y acaba argumentando que la filosofía es, de por sí, una ciencia inductiva: la ciencia que le enseña al científico cómo ser científico.