Introducción
I. Seguir a Cristo no previene las aflicciones terrenales
II. El Señor Jesús es realmente un ser humano
III. Aun el cristiano auténtico puede mostrar mucha debilidad
IV. El poder del Señor Jesucristo
V. El Señor Jesús trata tiernamente al creyente débil
Aplicaciones prácticas
Este sitio es seguro
Usted está en un sitio seguro, habilitado para SSL. Todas nuestras fuentes son constantemente verificadas.