La obra más importante de Alarcón, El sombrero de tres picos (1873), retoma el motivo popular del corregidor que quiere seducir a la molinera. Años después inspiró al andaluz Manuel de Falla su famoso ballet.
El sombrero de tres picos tuvo un éxito enorme desde su publicación y ha venido a ser considerada como su «obra de plenitud», donde, aparte de su acierto al retratar a grandes pinceladas a sus personajes, se nos presenta con más justeza como novelista de acciones, de sucesos, preocupado ante todo por el movimiento, por el desarrollo y avance de la historia.
El sombrero de tres picos tuvo un éxito enorme desde su publicación y ha venido a ser considerada como su «obra de plenitud», donde, aparte de su acierto al retratar a grandes pinceladas a sus personajes, se nos presenta con más justeza como novelista de acciones, de sucesos, preocupado ante todo por el movimiento, por el desarrollo y avance de la historia.