"“La solidez de una pisada es sostenida
por lo que no puede ser pisado por ella”
-Luis Felipe Passalacqua
Él, presencia espiritual desdoblada en múltiples “yo” biográficos recorre las ruinas de la Finca La Reata en Guaynabo donde, entre el recuerdo y el imaginario reflexivo, enfrenta el vórtice de lo que fuera su vida, convirtiéndole así en la antesala de su propia liberación. En el entre juego narrativo de historias fragmentadas con un sorprendente, como excitante, acento en los sentidos; Él experimenta una suerte de realismo mágico o bio-ficción que describe el estado de consciencia que le permite indagar su realidad y descubrir la fuerza de superación.
Este camino atraviesa los gruesos muros de un mundo que pulsa con la maldad, la amargura, la incomprensión y la ignorancia. Según recorremos el transcurso del tiempo al presente, sucumbimos ante el dolor, el odio, la venganza, la apatía y la soledad que solo parecen ser vencidos por la magia encontrada en sí mismo. Es a través de esta danza de movimientos sublimes y tonos bajos que Él pervive sobre la parte más oscura de su ser: un proceso de transformación ineludible. La evolución que parte de la fragmentación del Ser a su unión. Su libertad, su independencia.
Es de la lucha por sobrevivir, y de la subsecuente lucha por encontrarse que nace Luis Felipe Passalacqua. Primer escultor invidente de Puerto Rico; quien acciona sus impélidos dedos sobre un teclado, para la escritura sincera de su pensamiento. Su voz, en las variantes que descubre el arte como historia de vida se hará urgente entre nosotros. Él lo confirma.
Domingo Dávila Torres
Jorge G. Martínez"
por lo que no puede ser pisado por ella”
-Luis Felipe Passalacqua
Él, presencia espiritual desdoblada en múltiples “yo” biográficos recorre las ruinas de la Finca La Reata en Guaynabo donde, entre el recuerdo y el imaginario reflexivo, enfrenta el vórtice de lo que fuera su vida, convirtiéndole así en la antesala de su propia liberación. En el entre juego narrativo de historias fragmentadas con un sorprendente, como excitante, acento en los sentidos; Él experimenta una suerte de realismo mágico o bio-ficción que describe el estado de consciencia que le permite indagar su realidad y descubrir la fuerza de superación.
Este camino atraviesa los gruesos muros de un mundo que pulsa con la maldad, la amargura, la incomprensión y la ignorancia. Según recorremos el transcurso del tiempo al presente, sucumbimos ante el dolor, el odio, la venganza, la apatía y la soledad que solo parecen ser vencidos por la magia encontrada en sí mismo. Es a través de esta danza de movimientos sublimes y tonos bajos que Él pervive sobre la parte más oscura de su ser: un proceso de transformación ineludible. La evolución que parte de la fragmentación del Ser a su unión. Su libertad, su independencia.
Es de la lucha por sobrevivir, y de la subsecuente lucha por encontrarse que nace Luis Felipe Passalacqua. Primer escultor invidente de Puerto Rico; quien acciona sus impélidos dedos sobre un teclado, para la escritura sincera de su pensamiento. Su voz, en las variantes que descubre el arte como historia de vida se hará urgente entre nosotros. Él lo confirma.
Domingo Dávila Torres
Jorge G. Martínez"