Ken Follett, con su habitual maestría narrativa, ha conseguido una de sus novelas más impactantes.
Rodeado de montañas salvajes, el Valle de los Leones es un lugar legendario de Afganistán donde las costumbres y las personas apenas han cambiado con el paso de los siglos. Jane marchó allí con el médico francés Jean-Pierre cuando descubrió que su pareja, Ellis, trabajaba para el servicio de espionaje estadounidense.
El pequeño pueblo de Banda, aislado en esta tierra perdida y árida, se convertirá en el escenario de un relato de espionaje e intriga en el que nada ni nadie está libre de sospecha. La etapa más terrible de la guerra contra los invasores soviéticos ha dado comienzo, y el enfrentamiento entre rusos y estadounidenses se encuentra en su momento más intenso y delicado. Cualquier paso en falso podría ser el último.