Daniela no es una poeta o una artista, sino una madre a tiempo completo.
Cuando era una niña, ya sentía el deseo de comunicar sus sentimientos con dibujos y pequeñas composiciones. Este libro nace de ella, como la
persona sensible y simple que es, a pesar de no tener conocimientos técnicos en el campo literario y artístico, juega con versos, rimas, figuras del lenguaje, imágenes y sonidos intuitivamente, sin
reglas precisas.
Nos encontramos frente a diseños originales y elementales, escritos con una métrica libre, donde el ritmo y la música están dictados por puro instinto, gusto y placer personal del autor, sin ninguna técnica, al igual que aquellos que, a pesar de no tener estudios musicales, tocan instrumentos, cantan y componen canciones de oído.
Daniela se divierte con las palabras, no sólo en términos de sonidos, sino también con señales e imágenes; de hecho, utiliza negrita y cursiva creando vínculos entre las palabras, comienza con la primera letra en mayúscula o toda la oración en mayúsculas, quita el espacio, escribe palabras dispuesta en el centro, con letras espaciadas,
agrupadas en bloques o estrofas de líneas individuales.
En un libro electrónico, a continuación, estos elementos tienen que ver con el mecanismo de adaptación automática en el dispositivo de lectura, lo que hace pensar que los textos también pueden ocurrir en formas que van más allá del propio autor.
En la elaboración, para Daniela, la poesía y la música son aspectos variados de la misma realidad.
Cuando la inspiración lo ha permitido, los sonidos de las palabras, los acordes musicales, las imágenes mentales se mezclan con las imágenes hechas por el mismo autor que acompañan la composición.
En tales casos, el propósito es casi para degustar los diferentes sabores de una emoción, suscitándola con las palabras y renovándola con la imagen.
En la familia nos gusta llamar a sus escritos y sus dibujos "Poemas", sabiendo que para ella es simplemente una manera de expresar su
maravillosa forma de ser. Daniela habla de emociones pequeñas y esenciales. Sus pensamientos están relacionados con la vida diaria, las pequeñas alegrías de la vida familiar, el amor a sus hijos y su
cónyuge, pasión por el arte en general, desde la pintura hasta la música. Daniela quiere transmitir estos valores que están sólidamente arraigados en ella y que irradia sobre quienes tienen la suerte de
vivir y compartir con ella todos los días.
En un mundo donde el tiempo va rápido, dedicarse al arte y a la contemplación es siempre menor, mi esposa quiere proponer imágenes y palabras en libertad, expresión pura de sus pensamientos, para
comunicar c o n simplicidad, las emociones que siente. La simplicidad que es el fundamento de la felicidad.
Cuando era una niña, ya sentía el deseo de comunicar sus sentimientos con dibujos y pequeñas composiciones. Este libro nace de ella, como la
persona sensible y simple que es, a pesar de no tener conocimientos técnicos en el campo literario y artístico, juega con versos, rimas, figuras del lenguaje, imágenes y sonidos intuitivamente, sin
reglas precisas.
Nos encontramos frente a diseños originales y elementales, escritos con una métrica libre, donde el ritmo y la música están dictados por puro instinto, gusto y placer personal del autor, sin ninguna técnica, al igual que aquellos que, a pesar de no tener estudios musicales, tocan instrumentos, cantan y componen canciones de oído.
Daniela se divierte con las palabras, no sólo en términos de sonidos, sino también con señales e imágenes; de hecho, utiliza negrita y cursiva creando vínculos entre las palabras, comienza con la primera letra en mayúscula o toda la oración en mayúsculas, quita el espacio, escribe palabras dispuesta en el centro, con letras espaciadas,
agrupadas en bloques o estrofas de líneas individuales.
En un libro electrónico, a continuación, estos elementos tienen que ver con el mecanismo de adaptación automática en el dispositivo de lectura, lo que hace pensar que los textos también pueden ocurrir en formas que van más allá del propio autor.
En la elaboración, para Daniela, la poesía y la música son aspectos variados de la misma realidad.
Cuando la inspiración lo ha permitido, los sonidos de las palabras, los acordes musicales, las imágenes mentales se mezclan con las imágenes hechas por el mismo autor que acompañan la composición.
En tales casos, el propósito es casi para degustar los diferentes sabores de una emoción, suscitándola con las palabras y renovándola con la imagen.
En la familia nos gusta llamar a sus escritos y sus dibujos "Poemas", sabiendo que para ella es simplemente una manera de expresar su
maravillosa forma de ser. Daniela habla de emociones pequeñas y esenciales. Sus pensamientos están relacionados con la vida diaria, las pequeñas alegrías de la vida familiar, el amor a sus hijos y su
cónyuge, pasión por el arte en general, desde la pintura hasta la música. Daniela quiere transmitir estos valores que están sólidamente arraigados en ella y que irradia sobre quienes tienen la suerte de
vivir y compartir con ella todos los días.
En un mundo donde el tiempo va rápido, dedicarse al arte y a la contemplación es siempre menor, mi esposa quiere proponer imágenes y palabras en libertad, expresión pura de sus pensamientos, para
comunicar c o n simplicidad, las emociones que siente. La simplicidad que es el fundamento de la felicidad.
