Alice Madison, detective de Homicidios de la policía de Seattle, tiene una deuda pendiente con el enigmático John Cameron, que se encuentra encarcelado por el presunto asesinato de cinco criminales, y con el abogado de este, Nathan Quinn. Una deuda que nadie puede compensarles, y que parte de una pesadilla que se inició hace veinticinco años cuando tres niños fueron raptados y solo dos volvieron con vida.
Ahora, cuando ya nadie se lo espera, los restos del tercer niño, hermano pequeño de Quinn, aparecen, y Madison tiene que unir, de pista en pista, del presente al pasado, las piezas que conformarán la solución final del crimen. Pero un sádico asesino la acechará según avance la investigación y ella se verá en la disyuntiva de cruzar los límites de la ley.
¿Estará preparada para llegar tan lejos? Todos hacemos promesas, pero algunas están escritas con sangre, y Alice Madison sabe que al final tendrá que arriesgar hasta su propia alma para parar al asesino.
Ahora, cuando ya nadie se lo espera, los restos del tercer niño, hermano pequeño de Quinn, aparecen, y Madison tiene que unir, de pista en pista, del presente al pasado, las piezas que conformarán la solución final del crimen. Pero un sádico asesino la acechará según avance la investigación y ella se verá en la disyuntiva de cruzar los límites de la ley.
¿Estará preparada para llegar tan lejos? Todos hacemos promesas, pero algunas están escritas con sangre, y Alice Madison sabe que al final tendrá que arriesgar hasta su propia alma para parar al asesino.