El libro trata de exponer, comentar y analizar algunos de los temas que preocupan a todo intelectual, como la relación cerebro-mente, la vida, la religión, la verdad, el dolor y el placer, etc., pero considerados no sólo desde el punto de vista filosófico clásico, sino desde el más científico y moderno que les otorga la Biología.
Surge así la Biofilosofía, ciencia emergente que trata de conocer cómo se originan algunas de las manifestaciones biológicas más complejas, como el pensamiento, el razonamiento, la memoria, la vida, la verdad, el concepto de Dios, etc. en todo lo que tienen de procesos vitales y orgánicos. La Biofilosofía los estudia como fenómenos naturales, pertenecientes a la Biología, y por tanto constituidos por reacciones físico-químicas en las que se intercambia energía.
La biofilosofía, en sus aspectos más fisiológicos, trata de conocer estas reacciones que dan origen a las manifestaciones biológicas más complejas, a veces llamadas “superiores”, como el pensamiento lógico, el instintivo, el cálculo o el sentimiento amoroso. Trata de explicar la vida, las funciones de la mente humana, el conocimiento, el aprendizaje, la lógica, la razón, los sentimientos, las reacciones emocionales, etc. mediante conceptos y procesos neurofisiológicos, pues entiende que todos ellos son fenómenos puramente biológicos, es decir físico-químicos, en los que la electricidad, en forma de corrientes nerviosas, es el substrato real de las ideas y de los sentimientos.
Para estos procesos se han postulado, en la historia de la humanidad y de la filosofía, cientos de explicaciones, desde las idealistas y vitalistas hasta las místicas y sobrenaturales. Nosotros trataremos de aproximarnos a la explicación de tan curiosas manifestaciones humanas mediante hipótesis y experiencias que valoran los cambios de energía y la circulación de corrientes eléctricas que tienen lugar en los organismos vivos, es decir desde un punto de vista científico-experimental, apoyados en ciencias biológicas, especialmente la Neurofisiología. En términos muy generales, la biofilosofía podría considerarse como la biología de la razón. Etimológicamente sería una biología de la sabiduría, y más ampliamente podría considerarse como una antropología biológica natural.
Surge así la Biofilosofía, ciencia emergente que trata de conocer cómo se originan algunas de las manifestaciones biológicas más complejas, como el pensamiento, el razonamiento, la memoria, la vida, la verdad, el concepto de Dios, etc. en todo lo que tienen de procesos vitales y orgánicos. La Biofilosofía los estudia como fenómenos naturales, pertenecientes a la Biología, y por tanto constituidos por reacciones físico-químicas en las que se intercambia energía.
La biofilosofía, en sus aspectos más fisiológicos, trata de conocer estas reacciones que dan origen a las manifestaciones biológicas más complejas, a veces llamadas “superiores”, como el pensamiento lógico, el instintivo, el cálculo o el sentimiento amoroso. Trata de explicar la vida, las funciones de la mente humana, el conocimiento, el aprendizaje, la lógica, la razón, los sentimientos, las reacciones emocionales, etc. mediante conceptos y procesos neurofisiológicos, pues entiende que todos ellos son fenómenos puramente biológicos, es decir físico-químicos, en los que la electricidad, en forma de corrientes nerviosas, es el substrato real de las ideas y de los sentimientos.
Para estos procesos se han postulado, en la historia de la humanidad y de la filosofía, cientos de explicaciones, desde las idealistas y vitalistas hasta las místicas y sobrenaturales. Nosotros trataremos de aproximarnos a la explicación de tan curiosas manifestaciones humanas mediante hipótesis y experiencias que valoran los cambios de energía y la circulación de corrientes eléctricas que tienen lugar en los organismos vivos, es decir desde un punto de vista científico-experimental, apoyados en ciencias biológicas, especialmente la Neurofisiología. En términos muy generales, la biofilosofía podría considerarse como la biología de la razón. Etimológicamente sería una biología de la sabiduría, y más ampliamente podría considerarse como una antropología biológica natural.