El tejido óseo, por sus características particulares, actúa como reservorio de algunas drogas como son los bisfosfonatos que tienen afinidad por él, lo cual es útil para tratar diversas patologías óesas, pero no están carentes de efectos secundarios.
El proceso de remodelado óseo consiste en la resorción ósea por los osteoclastos y la formación de hueso por medio de los osteoblastos. Debido a la composición y elevada vascularización del hueso hace que este tenga afinidad por captar diversas sustancias como son los bisfosfonatos, donde se depositan, siendo su liberación muy lenta y dependiendo principalmente del proceso de remodelación. La cinética del remodelado óseo se representa mediante la determinación de biomarcadores que en la mayor parte de los casos son productos de degradación del colágeno óseo.
Uno de los efectos secundarios encontrado tras el uso de bisfosfonatos es la osteonecrosis de los maxilares, de difícil tratamiento y con una importante repercusión en la calidad de vida de los pacientes en tratamiento con estos fármacos. La actuación del profesional de la Odontología suele ser el factor que desencadena esta patología, siendo la prevención, la intervención atraumática y el tratamiento conservador los medios más adecuados para paliar esta importante complicación.
Realizamos en este artículo una revisión de la fisiopatología ósea, de los bisfosfonatos y de la osteonecrosis de los maxilares, ya que el conocimiento de este cuadro clínico se debe de tener en cuenta antes de tratar a estos pacientes.
El proceso de remodelado óseo consiste en la resorción ósea por los osteoclastos y la formación de hueso por medio de los osteoblastos. Debido a la composición y elevada vascularización del hueso hace que este tenga afinidad por captar diversas sustancias como son los bisfosfonatos, donde se depositan, siendo su liberación muy lenta y dependiendo principalmente del proceso de remodelación. La cinética del remodelado óseo se representa mediante la determinación de biomarcadores que en la mayor parte de los casos son productos de degradación del colágeno óseo.
Uno de los efectos secundarios encontrado tras el uso de bisfosfonatos es la osteonecrosis de los maxilares, de difícil tratamiento y con una importante repercusión en la calidad de vida de los pacientes en tratamiento con estos fármacos. La actuación del profesional de la Odontología suele ser el factor que desencadena esta patología, siendo la prevención, la intervención atraumática y el tratamiento conservador los medios más adecuados para paliar esta importante complicación.
Realizamos en este artículo una revisión de la fisiopatología ósea, de los bisfosfonatos y de la osteonecrosis de los maxilares, ya que el conocimiento de este cuadro clínico se debe de tener en cuenta antes de tratar a estos pacientes.