BENITO PÉREZ GALDÓS nació en Las Palmas de Gran Canaria el 10 de mayo de 1843. Fue el menor de los diez hijos de un teniente coronel, veterano de la guerra de la Independencia. Su infancia transcurrió apaciblemente en su ciudad natal, en la cual inicia el bachillerato en 1857, obteniendo dicho título en 1862, por lo que la familia decide enviarle a estudiar derecho a Madrid, a donde llega el 30 de setiembre de ese mismo año. Se instala en una modesta pensión y frecuenta el Ateneo, las bibliotecas, las tertulias literarias y la ópera. Pronto surge en él una mayor afición por las letras que por las leyes. En 1865 inició su carrera periodística en “La nación” y colaborará en “Las cortes” y “El debate”. En 1867 escribe “La Fontana de oro” con la que principia una de las más fecundas carreras literarias del ámbito hispánico. En 1886 acepta un acta de diputado, por el partido liberal de Sagasta, en representación del distrito portorriqueño de Guayama, y en 1889 es elegido académico.
“Fortunata y Jacinta” se fue publicando progresivamente entre 1886 y 1887. El protagonista masculino, Juanito Santa Cruz, hijo de don Baldomero y Bárbara Arnaiz, burgueses acomodados, comerciantes en paños, conoce a Fortunata, hija del bajo pueblo, con quien mantiene una relación que dura diez meses. Bárbara evidentemente la desaprueba y con objeto de cortarla por lo sano decide casar al retoño con su hermosa prima Jacinta. José Ido del Sagrario habla a esta última del “Pitusín”, supuesto hijo de Fortunata y Santa Cruz, el cual vive con su tío, José Izquierdo. Jacinta, ante su imposible maternidad, pretende a toda costa llevarse al pequeño a casa. Juan trata de quitárselo de la cabeza asegurándole que el hijo que tuvo con Fortunata murió. Sin embargo se entera de que su antigua amante ha vuelto a Madrid y la busca activamente. Gullón afirma que la novela se basa en una polaridad entre el bien y el mal, encarnados ambos, el uno en Guillermina y el otro en Mauricia, respectivamente ligadas a Jacinta, la esposa legítima, y a Fortunata, la amante ilícita.
“Fortunata y Jacinta” se fue publicando progresivamente entre 1886 y 1887. El protagonista masculino, Juanito Santa Cruz, hijo de don Baldomero y Bárbara Arnaiz, burgueses acomodados, comerciantes en paños, conoce a Fortunata, hija del bajo pueblo, con quien mantiene una relación que dura diez meses. Bárbara evidentemente la desaprueba y con objeto de cortarla por lo sano decide casar al retoño con su hermosa prima Jacinta. José Ido del Sagrario habla a esta última del “Pitusín”, supuesto hijo de Fortunata y Santa Cruz, el cual vive con su tío, José Izquierdo. Jacinta, ante su imposible maternidad, pretende a toda costa llevarse al pequeño a casa. Juan trata de quitárselo de la cabeza asegurándole que el hijo que tuvo con Fortunata murió. Sin embargo se entera de que su antigua amante ha vuelto a Madrid y la busca activamente. Gullón afirma que la novela se basa en una polaridad entre el bien y el mal, encarnados ambos, el uno en Guillermina y el otro en Mauricia, respectivamente ligadas a Jacinta, la esposa legítima, y a Fortunata, la amante ilícita.