Este manual busca proporcionar un marco conceptual para la integración, dinamización y promoción de la gestión ambiental. Toma como caso de referencia elementos existentes en el territorio de Colombia, pero su sentido es de carácter universal. El manual se estructura con base en seis capítulos que consideramos que le permitirán al estudioso, afianzar sus conocimientos en lo referido al tema ambiental e introducir elementos que le permitirán comprender de manera general, dinámica y holística el sentido de la gestión ambiental. Como es bien sabido, el concepto y los procesos de sostenibilidad ambiental son retos que todo país y nación tiene que emprender como parte de políticas mundiales que tienen expresión en las política nacionales de todos los países. Necesariamente un marco conceptual de este tipo tiene que facilitar el diseño de procesos de gestión-planificación participativos en todos los proyectos, acciones, programas y políticas que se ejecuten. Un proceso de gestión ambiental participativa, involucra el reconocimiento de los diferentes actores, sistemas culturales y sistemas ecológicos existentes. Lógicamente la diversidad cultural va unida a la biodiversidad y a la necesaria participación de los actores sociales y políticos: instituciones gubernamentales, agencias no-gubernamentales, universidades, municipalidades, empresas, profesionales, campesinos, indígenas, profesores, mujeres, estudiantes, familias y todo tipo de personas.
Tal vez uno de los problemas más preocupantes para la ciencia occidental en el presente siglo, ha sido su incapacidad para integrar e interpretar el conocimiento que ha producido acerca de la naturaleza, por un lado, y de la humanidad, por el otro. La división entre ciencias "sociales" y "naturales" que se ha mantenido, ha hecho imposible el abordaje integrado de los conflictos que aparecen cuando las actividades humanas afectan la naturaleza, y viceversa. En ese contexto, la gestión ambiental se constituye en una herramienta básica para abordar la comprensión y la solución de los problemas ambientales desde una perspectiva interdisciplinaria y de diálogo intercultural. Morello, citado por Leff, comenta que el desafió del trabajo interdisciplinario ambiental está en articular la lectura social y la natural enfrentando situaciones concretas vía demandas muy ajustadas de un saber a otro. Estas demandas generan adecuaciones metodológicas, técnicas y de lenguaje de cada disciplina en una tarea que se caracteriza por ser un proceso:
•dialéctico, que surge de las contradicciones que caracterizan el
esfuerzo de interrelacionar dos saberes;
•sistémico, porque obliga a analizar dinámicamente interrelaciones y
complementariedades (así como exclusiones entre diferentes saberes);
•interactivo, por qué es un acercamiento por aproximaciones;
•no restrictivo (abierto), por que busca alternativas de enriquecimiento
mutuo entre los dos (o más saberes)
Si la problemática ambiental se entiende como el conjunto de problemas generados por el hombre al interior de la sociedad, resultado del proceso de apropiación del patrimonio natural, mediante procesos tecnológicos y sociales inadecuados, es necesario explorar estos elementos para proponer alternativas de desarrollo. Dado que pretender redireccionar la tecnología y la organización de las sociedades es buscar un cambio fundamental de su estructura y funcionamiento, requerimos asumir que se está hablando de un cambio en el sistema cultural.
Algunas hipótesis inherentes a la gestión ambiental son:
i) La diversidad cultural está asociada a la diversidad ecosistémica del país y a la misma dinámica de los contactos culturales, pero mucho de lo que expresamos como diversidad cultural, no es otra cosa que las enormes diferencias sociales existentes en muchos países y que pueden constituirse en un serio impedimento para impulsar dinámicas de gestión ambiental.
Tal vez uno de los problemas más preocupantes para la ciencia occidental en el presente siglo, ha sido su incapacidad para integrar e interpretar el conocimiento que ha producido acerca de la naturaleza, por un lado, y de la humanidad, por el otro. La división entre ciencias "sociales" y "naturales" que se ha mantenido, ha hecho imposible el abordaje integrado de los conflictos que aparecen cuando las actividades humanas afectan la naturaleza, y viceversa. En ese contexto, la gestión ambiental se constituye en una herramienta básica para abordar la comprensión y la solución de los problemas ambientales desde una perspectiva interdisciplinaria y de diálogo intercultural. Morello, citado por Leff, comenta que el desafió del trabajo interdisciplinario ambiental está en articular la lectura social y la natural enfrentando situaciones concretas vía demandas muy ajustadas de un saber a otro. Estas demandas generan adecuaciones metodológicas, técnicas y de lenguaje de cada disciplina en una tarea que se caracteriza por ser un proceso:
•dialéctico, que surge de las contradicciones que caracterizan el
esfuerzo de interrelacionar dos saberes;
•sistémico, porque obliga a analizar dinámicamente interrelaciones y
complementariedades (así como exclusiones entre diferentes saberes);
•interactivo, por qué es un acercamiento por aproximaciones;
•no restrictivo (abierto), por que busca alternativas de enriquecimiento
mutuo entre los dos (o más saberes)
Si la problemática ambiental se entiende como el conjunto de problemas generados por el hombre al interior de la sociedad, resultado del proceso de apropiación del patrimonio natural, mediante procesos tecnológicos y sociales inadecuados, es necesario explorar estos elementos para proponer alternativas de desarrollo. Dado que pretender redireccionar la tecnología y la organización de las sociedades es buscar un cambio fundamental de su estructura y funcionamiento, requerimos asumir que se está hablando de un cambio en el sistema cultural.
Algunas hipótesis inherentes a la gestión ambiental son:
i) La diversidad cultural está asociada a la diversidad ecosistémica del país y a la misma dinámica de los contactos culturales, pero mucho de lo que expresamos como diversidad cultural, no es otra cosa que las enormes diferencias sociales existentes en muchos países y que pueden constituirse en un serio impedimento para impulsar dinámicas de gestión ambiental.