Historias conmovedoras. Relaciones estrechas. Amor eterno.
El millonario y atractivo Lucas Reika vive la vida como si de una eterna fiesta se tratara, yendo de un bar a otro y de hombre en hombre. Burlándose de la orden que le da su padre al exigirle que empiece a ganarse el sustento, Lucas decide seducir a un valioso empleado de la cocina de su restaurante insignia, lo que le acarreará tener que enfrentarse a un ultimátum: perder el acceso al dinero de su padre o quedarse en medio de la nada, con el hombre que siempre ha deseado en secreto.
Silencioso y trabajador, Jared McFarland adora su granja, situada en las afueras de Hope, Arizona, pero también desea tener a alguien con quien estar, al regresar a casa al final del día. Jared acepta acoger al hombre que ha sido su amor platónico como un favor. Pero cuando Lucas invade su corazón, además de su espacio, Jared tiene que decidir cuánto de sí mismo está dispuesto a arriesgar, y descubrir si puede ofrecerle a Lucas lo suficiente para que se quede a su lado después de que termine el castigo que su padre le ha impuesto.
El millonario y atractivo Lucas Reika vive la vida como si de una eterna fiesta se tratara, yendo de un bar a otro y de hombre en hombre. Burlándose de la orden que le da su padre al exigirle que empiece a ganarse el sustento, Lucas decide seducir a un valioso empleado de la cocina de su restaurante insignia, lo que le acarreará tener que enfrentarse a un ultimátum: perder el acceso al dinero de su padre o quedarse en medio de la nada, con el hombre que siempre ha deseado en secreto.
Silencioso y trabajador, Jared McFarland adora su granja, situada en las afueras de Hope, Arizona, pero también desea tener a alguien con quien estar, al regresar a casa al final del día. Jared acepta acoger al hombre que ha sido su amor platónico como un favor. Pero cuando Lucas invade su corazón, además de su espacio, Jared tiene que decidir cuánto de sí mismo está dispuesto a arriesgar, y descubrir si puede ofrecerle a Lucas lo suficiente para que se quede a su lado después de que termine el castigo que su padre le ha impuesto.