Tucídides engendró la historia política y crítica, con un estilo seco y una agudeza de análisis en cuanto a causas y consecuencias que se convertirá en modelo de todos los historiadores antiguos, desde Jenofonte y Polibio a Tácito y Salustio. En su obra hay algunos de los pasajes más célebres no sólo de la historiografía, sino de la literatura general.
En la guerra del Peloponeso, Grecia quedó escindida en dos bandos, como nunca lo había estado, y se sumió en un enfrentamiento fratricida que la alejó para siempre de su época clásica, pues ni la derrotada Atenas ni la triunfante Esparta dispondrían de fuerza suficiente para renovar antiguos esplendores.
Tucídides relató esta contienda de un modo inusitado, que engendró la historia política y crítica, con un estilo seco y una agudeza de análisis en cuanto a causas y consecuencias que se convertirá en modelo de todos los historiadores antiguos, desde Jenofonte y Polibio a Tácito y Salustio. En su obra hay momentos de especial intensidad, hitos, crestas expresivas que se han integrado entre los pasajes más célebres no sólo de la historiografía, sino de la literatura general: las digresiones iniciales sobre los comienzos de la civilización helena y sobre la historia de Grecia desde el final de las Guerras Médicas hasta el estallido de la Guerra del Peloponeso, los tres discursos de Pericles (en especial su oración fúnebre), el diálogo entre los atenienses y los melios antes de la aniquilación de éstos.
La descripción de los episodios en las partes narrativas alcanza cotas de enorme intensidad, y los discursos (que en parte reproducen las palabras tal como las pronunciaron los protagonistas, en parte responden al estilo oratorio de la época de Tucídides y en parte expresan los pareceres de éste) son paradigmas de elocuencia y de grandeza dramática.
Al decir de C. M. Bowra, "contempla los acontecimientos de la guerra como parte de un vasto drama humano y escribe sobre ellos con una pasión tal que, aunque en parte quede oculta por su estilo objetivo de narrar, se nos transmite conforme vamos leyendo lo que cuenta ... Sabe transmitir la exaltación de la victoria y la melancolía de la derrota, el ardor con que los hombres se lanzan al combate".
Los libros III y IV prosiguen el relato de la Guerra Arquidámica. Cabe destacar en ellos el famoso debate entre Cleón y Diódoto, donde se manifiestan las dos orientaciones, radical y moderada, de la política imperialista ateniense; la rendición de Platea a Esparta y los discursos subsiguientes; la campaña de Pilos; el final de la guerra civil de Corcira...