En esta novela para adultos, Jeremías Tucker era un jugador primero y un segundo pistolero. Uno siempre parecía ir con la otra. Era alto, de más de seis pies y tres pulgadas, al igual que su padre, con el pelo negro y los ojos azules. Tenía una manera con las mujeres, pero el tipo de mujer que frecuentaba las casas de juego y las barcas eran igual que él - no es el tipo de establecerse - por lo que nunca se había casado. La Guerra Civil había terminado hacía cinco años. Era el año 1870 y que estaba esperando para entrar en la sala del tribunal por segunda vez. Mientras estaba sentado allí esperando, estaba rodeado de periodistas y novelistas dime que quieren escuchar las historias de sus tiroteos. Se echó hacia atrás en su silla y encendió un cigarro.
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