Si bien es cierto que “La Celestina,” obra maestra de Fernando de Rojas, nos deja con muchas dudas sobre la personalidad de los personajes, esta misma vaguedad hace que el texto parezca más realista, permitiendo incluso una lectura moderna. Poco sabemos también sobre la autoría de la obra; solamente que Fernando de Rojas, el único autor conocido, fue un judío converso nacido en Montalbán, que estudió en la Universidad de Salamanca. Después de escribir esta obra maestra en su juventud, simplemente desapareció de la escena literaria: fue a Talavera para ejercer el oficio de abogado y allí murió en 1541.
El lugar de la acción de la obra no parece tener semejanza geográfica específica con ningún pueblo de España. Quedan también como meras sombras varios grupos de personajes, como es el caso de la muchedumbre que asiste al ajusticiamiento de Sempronio y Pármeno o de los vecinos congregados alrededor de Pleberio cuando este da su discurso final). Y aunque las descripciones físicas de los personajes centrales de la obra no son nada más que bosquejos, hay una gran profundidad en sus personalidades. Los dos personajes centrales cuyas vidas y destinos se enlazan apasionadamente, Calisto y Melibea, comparten una historia que se extiende más allá de los confines de "La Celestina". Desde sus primeras palabras vemos que se han conocido antes del comienzo de la obra: "en tan conueniente lugar que mi secreto dolor manifestarte pudiesse. sin duda encomparablemente es mayor tal galardon que el seruicio: sacrificio: deuocion e obras pias que por este lugar alcançar tengo yo a dios ofrescido." Estas vidas que se mueven tanto dentro como fuera de la obra encontrarán su eco más de cien años después en el arte de Velázquez, donde hay figuras que aparecen dentro y fuera de la pintura.
La presente edición se ha hecho con el propósito de permitir al lector moderno leer La Celestina de la manera en que se escribió en la versión original. Con este objetivo, se ha mantenido la ortografía y la puntuación de los facsímiles hasta el punto más razonable, pero a la vez se incluye un extenso vocabulario (fácilmente accesible) de las palabras que pueden presentar problemas tanto a los lectores cuya lengua materna es el español como a los que hayan aprendido el español como un segundo idioma. El texto cuenta, asimismo, con un gran número de notas que pueden facilitar el entendimiento de ciertas frases y refranes, alusiones clásicas y las fuentes que utilizó el autor como inspiración para escribir su obra.
Por ejemplo, el primer encuentro que vemos entre Calisto y Melibea contiene esta frase: “Mas, o triste, que en esto deferimos: que ellos puramente se glorifican sin temor de caer de tal bienauenturança: e yo misto me alegro con recelo del esquiuo tormento que tu absencia me ha de causar.” En el glosario adjunto se pueden ver las siguientes explicaciones: “deferimos”: diferir: ser diferente; “bienauenturança”: bienaventuranza: felicidad; “misto”: mixto (compuesto de cuerpo y espíritu); “recelo”: recelar: temer, temor; “esquiuo”: esquivo: áspero, malo; “absencia”: ausencia.
En el glosario, la referencia a Celestina como una vieja alcoholada da la siguiente explicación: “alcoholada” - el pelo ennegrecido con alcohol.
La palabra “cabron” del laboratorio de la hechicera se explica de la siguiente manera: macho de la cabra; "si la verga del baron fuere vntada con fiel de carnero o de cabron da grand voluntad & deleitaçion a dormjr con muger" (El libro de recetas de Gilberto [s. XV]).
El refrán "quando dios queria" se explica así: "'Cuando Dios quería, allende la barba escupía; ahora que no puedo, escúpome aquí luego.' Cuando Dios quería se dice acordándose y haciendo mención de mejor tiempo y fortuna." (Correas, 133).
Para esta edición se han utilizado las cuatro siguientes versiones de "La Celestina": Burgos, 1499, 16 actos, facsímile. Toledo, 1500, 16 actos, facsímile. Sevilla, 1501. Valencia, 1514, 21 actos y otras interpolaciones, facsímile.
El lugar de la acción de la obra no parece tener semejanza geográfica específica con ningún pueblo de España. Quedan también como meras sombras varios grupos de personajes, como es el caso de la muchedumbre que asiste al ajusticiamiento de Sempronio y Pármeno o de los vecinos congregados alrededor de Pleberio cuando este da su discurso final). Y aunque las descripciones físicas de los personajes centrales de la obra no son nada más que bosquejos, hay una gran profundidad en sus personalidades. Los dos personajes centrales cuyas vidas y destinos se enlazan apasionadamente, Calisto y Melibea, comparten una historia que se extiende más allá de los confines de "La Celestina". Desde sus primeras palabras vemos que se han conocido antes del comienzo de la obra: "en tan conueniente lugar que mi secreto dolor manifestarte pudiesse. sin duda encomparablemente es mayor tal galardon que el seruicio: sacrificio: deuocion e obras pias que por este lugar alcançar tengo yo a dios ofrescido." Estas vidas que se mueven tanto dentro como fuera de la obra encontrarán su eco más de cien años después en el arte de Velázquez, donde hay figuras que aparecen dentro y fuera de la pintura.
La presente edición se ha hecho con el propósito de permitir al lector moderno leer La Celestina de la manera en que se escribió en la versión original. Con este objetivo, se ha mantenido la ortografía y la puntuación de los facsímiles hasta el punto más razonable, pero a la vez se incluye un extenso vocabulario (fácilmente accesible) de las palabras que pueden presentar problemas tanto a los lectores cuya lengua materna es el español como a los que hayan aprendido el español como un segundo idioma. El texto cuenta, asimismo, con un gran número de notas que pueden facilitar el entendimiento de ciertas frases y refranes, alusiones clásicas y las fuentes que utilizó el autor como inspiración para escribir su obra.
Por ejemplo, el primer encuentro que vemos entre Calisto y Melibea contiene esta frase: “Mas, o triste, que en esto deferimos: que ellos puramente se glorifican sin temor de caer de tal bienauenturança: e yo misto me alegro con recelo del esquiuo tormento que tu absencia me ha de causar.” En el glosario adjunto se pueden ver las siguientes explicaciones: “deferimos”: diferir: ser diferente; “bienauenturança”: bienaventuranza: felicidad; “misto”: mixto (compuesto de cuerpo y espíritu); “recelo”: recelar: temer, temor; “esquiuo”: esquivo: áspero, malo; “absencia”: ausencia.
En el glosario, la referencia a Celestina como una vieja alcoholada da la siguiente explicación: “alcoholada” - el pelo ennegrecido con alcohol.
La palabra “cabron” del laboratorio de la hechicera se explica de la siguiente manera: macho de la cabra; "si la verga del baron fuere vntada con fiel de carnero o de cabron da grand voluntad & deleitaçion a dormjr con muger" (El libro de recetas de Gilberto [s. XV]).
El refrán "quando dios queria" se explica así: "'Cuando Dios quería, allende la barba escupía; ahora que no puedo, escúpome aquí luego.' Cuando Dios quería se dice acordándose y haciendo mención de mejor tiempo y fortuna." (Correas, 133).
Para esta edición se han utilizado las cuatro siguientes versiones de "La Celestina": Burgos, 1499, 16 actos, facsímile. Toledo, 1500, 16 actos, facsímile. Sevilla, 1501. Valencia, 1514, 21 actos y otras interpolaciones, facsímile.