"LOS RÍOS SON CAMINOS QUE SE MUEVEN", debe haber pensado aquel hombre del Paleolítico observando un tronco siendo llevado por la corriente del río. Siempre había vivido en la cercanía del vital elemento —que aún no había aprendido a canalizar, almacenar o transportar— para sobrevivir en el mundo prehistórico de selvas, cavernas y gigantescos animales salvajes. No cabe duda de que el espectáculo del tronco arrastrado por el agua debe haber despertado su curiosidad. Podría moverse con un tronco para cruzar aquel río y poder explorar la otra margen? Que había del otro lado del río?
Fue el comienzo de la navegación. Un hombre aferrado a un madero flotante; más tarde, un hombre dirigiendo o retardando el movimiento mediante una gruesa rama que tocara el fondo. Luego vendría la balsa, hecha de troncos ligados con lianas, o el gran madero vaciado para formar una canoa. Estas primeras canoas aparecen ya en el año 30.000 antes de Cristo. De esa forma comienza este libro, que relata la historia de la navegación, los descubrimientos geográficos, los avances técnicos en cada época, además de un detallado relato de las grandes batallas navales de la Historia.
Fue el comienzo de la navegación. Un hombre aferrado a un madero flotante; más tarde, un hombre dirigiendo o retardando el movimiento mediante una gruesa rama que tocara el fondo. Luego vendría la balsa, hecha de troncos ligados con lianas, o el gran madero vaciado para formar una canoa. Estas primeras canoas aparecen ya en el año 30.000 antes de Cristo. De esa forma comienza este libro, que relata la historia de la navegación, los descubrimientos geográficos, los avances técnicos en cada época, además de un detallado relato de las grandes batallas navales de la Historia.