En un lugar olvidado del centro de la península Ibérica, a finales del Imperio romano tiene lugar el nacimiento y evolución de una villa, un lugar que se transforma en vergel por medio de varios elementos, muchos de ellos mágicos.
Novela coral, donde la historia, el humor, la leyenda y la misma magia se mezclan a partes iguales; la epopeya fundacional de un conjunto muy heterogéneo de gentes que vivieron una época oscura y desconocida, un enclave cargado de misterio en el cual se fundió la última etapa de un decadente Imperio romano con el inicio de la Edad Media.
“Una novela que se adentra en lo inhóspito del pasado, en una naturaleza donde lo mágico era real y lo real era mágico; y en la que los pilares básicos de la vida, el amor y la muerte ya sustentaban todo el mundo conocido.“ Ramón Alcaraz (Editor, director del taller literario El desván de la Memoria)
- “Una historia donde la técnica narrativa es impecable, tiene párrafos realmente preciosos y la relación de los personajes se desarrolla de modo en que uno puede alcanzar casi la intimidad con ellos. Sin duda son el punto más fuerte de esta historia.” Concepción Perea. Lectora editorial.
Novela coral, donde la historia, el humor, la leyenda y la misma magia se mezclan a partes iguales; la epopeya fundacional de un conjunto muy heterogéneo de gentes que vivieron una época oscura y desconocida, un enclave cargado de misterio en el cual se fundió la última etapa de un decadente Imperio romano con el inicio de la Edad Media.
“Una novela que se adentra en lo inhóspito del pasado, en una naturaleza donde lo mágico era real y lo real era mágico; y en la que los pilares básicos de la vida, el amor y la muerte ya sustentaban todo el mundo conocido.“ Ramón Alcaraz (Editor, director del taller literario El desván de la Memoria)
- “Una historia donde la técnica narrativa es impecable, tiene párrafos realmente preciosos y la relación de los personajes se desarrolla de modo en que uno puede alcanzar casi la intimidad con ellos. Sin duda son el punto más fuerte de esta historia.” Concepción Perea. Lectora editorial.