Cerca de Villalela hay un bosque habitado por la criatura más terrible jamás conocida, el Hombre Bobo. Un terrible ser que te deja medio tonto, o tonto del todo, con solo tocarte. Además, provoca todo tipo de desgracias entre los habitantes del pueblo: si desaparece una vaca, si alguien se come los pasteles que mamá preparaba para la merienda, si se pierde el dinero del pan… todo es culpa suya. Como también lo es que los niños se aburran desde que se decidió cerrar la escuela, y que no sepan ni leer ni escribir.
Por fin, Pimpín, el niño más bajito de Villalela, decide ir a por un pelo del Hombre Bobo, para mostrar su valentía y conseguir que los demás dejen de meterse con él. Llegará a estar frente al terrible monstruo y descubrirá que no es como lo pintan los relatos de los vecinos y que de «bobo» no tiene nada.
Por fin, Pimpín, el niño más bajito de Villalela, decide ir a por un pelo del Hombre Bobo, para mostrar su valentía y conseguir que los demás dejen de meterse con él. Llegará a estar frente al terrible monstruo y descubrirá que no es como lo pintan los relatos de los vecinos y que de «bobo» no tiene nada.