El protagonista de esta novela quiere dejar de fumar, sobre todo cuando su mujer, el día antes de morir, expresa ese deseo. A partir de entonces, el narrador lucha contra su adicción, pero es en vano. Hasta que después de venderlo todo y salir huyendo, después incluso de perder toda esperanza, topa en mitad de la carretera con Marcelo Cuesta, un muchacho que ha basado toda su vida en aprovecharse de los demás. Ambos compartirán todo el tiempo libre del que gozan, descubrirán alguna pasión conjunta (como el póquer, la poesía de Karmelo Iribarren o la música de Joaquín Sabina) y, finalmente, comprenderán que ninguno de los dos tiene demasiado que perder.
"La mirada del perro" es un thriller impactante y vertiginoso, una novela de carretera donde nada (ni nadie) es lo que parece.
"La mirada del perro" es un thriller impactante y vertiginoso, una novela de carretera donde nada (ni nadie) es lo que parece.