En la Pasión nos encontramos el amor y el miedo. La fragilidad que es capaz de asumir sus errores, y la que no lo hace y queda presa de la culpa y el remordimiento. La dureza de corazón y la compasión profunda. El perdón, el rencor, el egoísmo de quien busca su propia conveniencia. La fidelidad de quien no tiene miedo a arriesgarse por aquellos a quienes ama. La ternura, que aparece una y otra vez en los rincones más inesperados. Y nos encontramos, por supuesto, a Jesús. Es él el que, de una u otra forma, nos revela más sobre Dios y sobre el ser humano. Desde la entrega y desde el misterio. Desde los gestos concretos de su vida hasta el gesto último de la cruz abrazada.
Contemplar, nos dice José María Rodríguez Olaizola, es prestar atención al detalle; empaparse de lo que uno ve; dejar que, de algún modo, te remueva, te implique, te envuelva. Y es lo que él intenta hacer con el evangelio. En este libro se adentra en el relato de la Pasión. Y al hacerlo invita al lector a descubrir su afinidad con personajes y situaciones, a comprender un poco mejor a Jesús en este momento culminante de su vida y, tal vez, a reflexionar sobre la propia historia.
Otros libros del mismo autor en esta editorial son: Hoy es Ahora: Gente sólida para tiempos líquidos / La alegría, también de noche / Contemplaciones de papel / En tierra de nadie.
Contemplar, nos dice José María Rodríguez Olaizola, es prestar atención al detalle; empaparse de lo que uno ve; dejar que, de algún modo, te remueva, te implique, te envuelva. Y es lo que él intenta hacer con el evangelio. En este libro se adentra en el relato de la Pasión. Y al hacerlo invita al lector a descubrir su afinidad con personajes y situaciones, a comprender un poco mejor a Jesús en este momento culminante de su vida y, tal vez, a reflexionar sobre la propia historia.
Otros libros del mismo autor en esta editorial son: Hoy es Ahora: Gente sólida para tiempos líquidos / La alegría, también de noche / Contemplaciones de papel / En tierra de nadie.