Nosotros pensamos que el aprendizaje y la utilización de los Medicamentos Homeopáticos se facilitan y se hacen más congruentes e integrales si percibimos sus “rostros” en conexión con los “rostros de las Personalidades del Eneagrama”... Intentamos, pues, hacer Analogías (homeodinámica-homeopatía) entre las Características de los Medicamentos (resultado de la Experimentación Pura) y las Características de cada Personalidad del Eneagrama (Sabiduría milenaria de origen desconocido)...
Las aparentes “contradicciones” en el “rostro” de un determinado medicamento se aclaran y se encuentra su luz y su congruencia cuando uno comprende que los experimentadores eran individuos con Personalidades diferentes y que, entonces, dentro de la unidad básica que se podía apreciar en el “rostro” de un determinado medicamento como resultado de la experimentación, también cada individuo particular ofrecía, conforme a su Personalidad y su Sensibilidad, características propias que aportaban tonalidades propias y diferentes –a veces “contradictorias”- al “rostro básico” de ese Medicamento...
Precisamente porque no existen los “tipos puros” en ninguna Tipología de la Personalidad y porque las Experimentaciones Puras se hicieron con sujetos “no puros”, con Personalidades y sensibilidades diferentes, es que cobra una gran importancia el Eneagrama para comprender mejor los “rostros” de nuestros Medicamentos Homeopáticos y poder indicarlos en una forma más adecuada y segura... El concepto de “Alas” de cada Personalidad y el concepto de “Direcciones de Integración y Desintegración” en la Tipología del Eneagrama son claves para comprender cómo un determinado Tipo puede presentar cuando menos “cinco rostros” diferentes y hasta opuestos entre sí, y explican, analógicamente, los también varios “rostros” que resultan en la Experimentación Homeopática de los Medicamentos en el hombre sano...
Por eso en esta serie de libros presentaremos la “Materia Médica Homeopática”, pero estructurada conforme a las correspondencias analógicas con los “rostros” del Eneagrama. No sólo los “Nueve Rostros básicos” sino también los “otros rostros”, los que resultan de la conjunción de cada Tipo básico con una u otra de sus Alas, o con una u otra de sus Direcciones de Integración y Desintegración...
En este sentido, así como el Eneagrama completa y potencia la Materia Médica Homeopática, también la Materia Médica completa y potencia la comprensión y uso del Eneagrama. Algunos autores han intentado hacer las descripciones de, por ejemplo, un Tipo Uno con Ala Dos, o la de un Tipo Uno con Ala Nueve, o la de un Tipo Nueve integrado a Siete, o desintegrado a Cuatro, o integrado a Cuatro o desintegrado a Siete. Pero ha sido un esfuerzo teórico y sin bases muy concretas... Lo que nosotros haremos será presentar todos estos innumerables rostros en una forma no teórica sino concreta, práctica y real, gracias a los resultados de la Experimentación Pura en Homeopatía... Nuestras descripciones de un Uno-dos o de un Uno-nueve, o de un Dos-cuatro o de un Dos-ocho, o incluso de un Tres-cuatro-nueve o de un Tres-dos-seis no serán un mero ejercicio intelectual hipotético sino el resultado de la Experimentación Científica en cientos de personas y a lo largo de más de dos siglos...
Estamos seguros de que los Homeópatas que reflexionen y comprueben lo que aquí estamos afirmando, se harán también, en beneficio de su Arte Médico, estudiosos y entusiastas del Eneagrama (una Sabiduría Milenaria, cuyos orígenes pueden rastrearse hasta por lo menos cuatro mil años)... Y estamos seguros de que los conocedores del Eneagrama, Psicoteraputas o no, Personas espirituales o no, que reflexionen y comprueben lo que afirma la Homeopatía sobre esos “rostros” y su curación, se harán también, en beneficio de su Arte Psicológico y Espiritual, estudiosos y entusiastas de la Amada Homeopatía...
Dr. Álvaro Sierra Máyer, Sanador Integral
Las aparentes “contradicciones” en el “rostro” de un determinado medicamento se aclaran y se encuentra su luz y su congruencia cuando uno comprende que los experimentadores eran individuos con Personalidades diferentes y que, entonces, dentro de la unidad básica que se podía apreciar en el “rostro” de un determinado medicamento como resultado de la experimentación, también cada individuo particular ofrecía, conforme a su Personalidad y su Sensibilidad, características propias que aportaban tonalidades propias y diferentes –a veces “contradictorias”- al “rostro básico” de ese Medicamento...
Precisamente porque no existen los “tipos puros” en ninguna Tipología de la Personalidad y porque las Experimentaciones Puras se hicieron con sujetos “no puros”, con Personalidades y sensibilidades diferentes, es que cobra una gran importancia el Eneagrama para comprender mejor los “rostros” de nuestros Medicamentos Homeopáticos y poder indicarlos en una forma más adecuada y segura... El concepto de “Alas” de cada Personalidad y el concepto de “Direcciones de Integración y Desintegración” en la Tipología del Eneagrama son claves para comprender cómo un determinado Tipo puede presentar cuando menos “cinco rostros” diferentes y hasta opuestos entre sí, y explican, analógicamente, los también varios “rostros” que resultan en la Experimentación Homeopática de los Medicamentos en el hombre sano...
Por eso en esta serie de libros presentaremos la “Materia Médica Homeopática”, pero estructurada conforme a las correspondencias analógicas con los “rostros” del Eneagrama. No sólo los “Nueve Rostros básicos” sino también los “otros rostros”, los que resultan de la conjunción de cada Tipo básico con una u otra de sus Alas, o con una u otra de sus Direcciones de Integración y Desintegración...
En este sentido, así como el Eneagrama completa y potencia la Materia Médica Homeopática, también la Materia Médica completa y potencia la comprensión y uso del Eneagrama. Algunos autores han intentado hacer las descripciones de, por ejemplo, un Tipo Uno con Ala Dos, o la de un Tipo Uno con Ala Nueve, o la de un Tipo Nueve integrado a Siete, o desintegrado a Cuatro, o integrado a Cuatro o desintegrado a Siete. Pero ha sido un esfuerzo teórico y sin bases muy concretas... Lo que nosotros haremos será presentar todos estos innumerables rostros en una forma no teórica sino concreta, práctica y real, gracias a los resultados de la Experimentación Pura en Homeopatía... Nuestras descripciones de un Uno-dos o de un Uno-nueve, o de un Dos-cuatro o de un Dos-ocho, o incluso de un Tres-cuatro-nueve o de un Tres-dos-seis no serán un mero ejercicio intelectual hipotético sino el resultado de la Experimentación Científica en cientos de personas y a lo largo de más de dos siglos...
Estamos seguros de que los Homeópatas que reflexionen y comprueben lo que aquí estamos afirmando, se harán también, en beneficio de su Arte Médico, estudiosos y entusiastas del Eneagrama (una Sabiduría Milenaria, cuyos orígenes pueden rastrearse hasta por lo menos cuatro mil años)... Y estamos seguros de que los conocedores del Eneagrama, Psicoteraputas o no, Personas espirituales o no, que reflexionen y comprueben lo que afirma la Homeopatía sobre esos “rostros” y su curación, se harán también, en beneficio de su Arte Psicológico y Espiritual, estudiosos y entusiastas de la Amada Homeopatía...
Dr. Álvaro Sierra Máyer, Sanador Integral