Este libro retoma, bajo la forma del cuento, los temas favoritos de
Félix Luna. "La última montonera" está inspirado en el rescate de la
cultura tradicional de la Argentina profunda que el autor conoció en su
infancia a través de relatos familiares, amplió en los recorridos a mula
durante sus tiempos de estudiante y profundizó con documentos en mano a
lo largo de toda su vida. Publicado originalmente en 1955, indaga en la
historia de los paisanos derrotados por las fuerzas nacionales hacia
1870, cuando el país iniciaba un proceso acelerado de modernización. Los
personajes elegidos son a veces ficticios y en otros casos reales, como
el caudillo Santos Guayama o el coronel Ceferino Chanampa. En las
ficciones de "La noche de la Alianza", el eje central es la historia
contemporánea, en particular los años del segundo gobierno de Perón y
del comienzo de la Revolución Libertadora. Aquí, en cambio, los cuentos
se relacionan con la propia vida del autor, que como joven opositor tuvo
la dura experiencia de la tortura y la cárcel. Escrito en 1961, momento
en el que Luna ya podía ver con claridad las luces y sombras de aquella
época, se revela su vigoroso talento como narrador y la trascendencia
del tema elegido: los desencuentros de los argentinos.
Félix Luna. "La última montonera" está inspirado en el rescate de la
cultura tradicional de la Argentina profunda que el autor conoció en su
infancia a través de relatos familiares, amplió en los recorridos a mula
durante sus tiempos de estudiante y profundizó con documentos en mano a
lo largo de toda su vida. Publicado originalmente en 1955, indaga en la
historia de los paisanos derrotados por las fuerzas nacionales hacia
1870, cuando el país iniciaba un proceso acelerado de modernización. Los
personajes elegidos son a veces ficticios y en otros casos reales, como
el caudillo Santos Guayama o el coronel Ceferino Chanampa. En las
ficciones de "La noche de la Alianza", el eje central es la historia
contemporánea, en particular los años del segundo gobierno de Perón y
del comienzo de la Revolución Libertadora. Aquí, en cambio, los cuentos
se relacionan con la propia vida del autor, que como joven opositor tuvo
la dura experiencia de la tortura y la cárcel. Escrito en 1961, momento
en el que Luna ya podía ver con claridad las luces y sombras de aquella
época, se revela su vigoroso talento como narrador y la trascendencia
del tema elegido: los desencuentros de los argentinos.