Fruto del destino, o de razones más poderosas, Lorca y su mítico personaje Bernarda Alba acaban en el cielo, que dista de ser el lugar más acogedor del mundo. Para matar el rato, Lorca rasguea un guitarra con poco interés mientras Bernarda se empeña en darle vueltas a su pasado.
Lorca y Bernarda Alba aprovechan la ocasión para zanjar las cuentas pendientes propias entre autor y personaje.
Después de Trenes para María y Una casa bien iluminada, Francisco Rodríguez Criado nos ofrece esta breve entrega teatral, publicada por primera vez por la editorial emeritense De la Luna Libros en 2010, donde nuevamente hombres y mujeres profundizan en sus conflictos con intensidad, sin formalismos, dejando fluir la furia de sus sentimientos.
Lorca y Bernarda Alba aprovechan la ocasión para zanjar las cuentas pendientes propias entre autor y personaje.
Después de Trenes para María y Una casa bien iluminada, Francisco Rodríguez Criado nos ofrece esta breve entrega teatral, publicada por primera vez por la editorial emeritense De la Luna Libros en 2010, donde nuevamente hombres y mujeres profundizan en sus conflictos con intensidad, sin formalismos, dejando fluir la furia de sus sentimientos.