En medio de gobiernos que limitan la libertad de expresión, de narcos que asesinan a periodistas, la investigación periodística se abre paso para descubrir las redes de corrupción entre el poder terrenal y celestial. Gabriel, periodista iconoclasta, se ve enredado en una secuencia de asesinatos cuyo origen apunta a una poderosa secta religiosa; mientras tanto, el amor con LunaMía, sirve de ancla a la realidad para no volverse loco en medio de la sevicia del grupo de asesinos.
Al borde de la muerte, él, tendrá una especie de resurrección que le permitirá dar con el principal cabecilla, cuyo poder, rebasa al poder político. Gabriel casi muere en el intento y ella, como única luz, le ayudará a sobrevivir, guiándolo en medio de las tinieblas.
Al borde de la muerte, él, tendrá una especie de resurrección que le permitirá dar con el principal cabecilla, cuyo poder, rebasa al poder político. Gabriel casi muere en el intento y ella, como única luz, le ayudará a sobrevivir, guiándolo en medio de las tinieblas.