Querido escritor, o escritora, que te dispones a leer estas páginas. Te preguntarás qué es esto de: Manual de emergencia, ¿acaso habrás de salir huyendo, cuando te encuentres frente a frente con tu vocación literaria? No, no lo creo. Pero es probable que de pronto, se te presenten los temidos fantasmas del bloqueo o te falte información sobre cómo funciona esto del oficio de escribir.
Escribir es una forma de vida. El escritor que no escribe muere. Es una necesidad, como comer, beber, reír e incluso llorar. Un mundo por descubrir donde no sólo debemos aprender la técnica y conocer las herramientas con las que trabajar. Es importante descubrir todo lo que se refiere a nuestro oficio. Cómo se escribe, cómo encontrar la inspiración, cómo funciona el mercado editorial, el Registro de Propiedad Intelectual y un largo etcétera.
En este libro queremos contarte, motivarte, ayudarte y acompañarte para que tú también alcances un puesto en este difícil mundo de las letras. Sí, no es fácil, pero te aseguro que si te empeñas, no será tan complicado que tú también llegues a ver tus libros publicados. Un consejo, que no te devoren las prisas. Fortalece tu pluma y pon las manos en el tintero, imprégnate de esa tinta y dibuja con tu paleta de palabras, un fantástico mundo, un cuento, un poema, un relato donde tu voz quede reflejada con la calidad suficiente como para que el lector desee quedarse contigo, con esa voz que le sumerja en tu mundo de tal manera que pueda ser partícipe del mismo.
Escribir es una forma de vida. El escritor que no escribe muere. Es una necesidad, como comer, beber, reír e incluso llorar. Un mundo por descubrir donde no sólo debemos aprender la técnica y conocer las herramientas con las que trabajar. Es importante descubrir todo lo que se refiere a nuestro oficio. Cómo se escribe, cómo encontrar la inspiración, cómo funciona el mercado editorial, el Registro de Propiedad Intelectual y un largo etcétera.
En este libro queremos contarte, motivarte, ayudarte y acompañarte para que tú también alcances un puesto en este difícil mundo de las letras. Sí, no es fácil, pero te aseguro que si te empeñas, no será tan complicado que tú también llegues a ver tus libros publicados. Un consejo, que no te devoren las prisas. Fortalece tu pluma y pon las manos en el tintero, imprégnate de esa tinta y dibuja con tu paleta de palabras, un fantástico mundo, un cuento, un poema, un relato donde tu voz quede reflejada con la calidad suficiente como para que el lector desee quedarse contigo, con esa voz que le sumerja en tu mundo de tal manera que pueda ser partícipe del mismo.