Milán, primavera de 1967. Doce consejeros tienen que decidir sobre el futuro de una grande zona degradada en la periferia al norte de la ciudad. El único que se opone al plan urbanístico es el Arquitecto, porque está convencido de que la mejor solución es un proyecto muy distinto, basado en un pasado muy lejano, cuando la zona formaba parte de la Gran Selva, un lugar mágico hecho por inmensos prados, largos ríos, vegetación exuberante y especies animales que ahora están extintas.
De ahí empieza el viaje en el tiempo a través de la historia de Milán y de su tierra, desde la fundación de los Celtas bajo el nombre de Medhelan (lugar sagrado) hasta el presente, con personajes históricos reales y personajes de fantasía que pertenecen al reino animal y vegetal, testigos de la transformación que la tierra sufrió durante los siglos y de la larga lucha entre Naturaleza y Civilización, desde que la conexión Hombre-Cosmos-Naturaleza se rompió. Y así junto al rey celta Belloveso, de Federico Barbarroja, Francesco Sforza, Ludovico Sforza y de un inédito Leonardo da Vinci conocemos también a Etherna, el roble depositario de la sabiduría milenaria, Asio, el búho sabio jefe de la Gran Selva junto a su fiel cuervo Barón Rook y Apodeus, el ratón marrón que con su astucia derrota a las ratas negras y con ellos la peste.
Pero las razones del Arquitecto no convencen la mayoría a renunciar al plan urbanístico, hasta cuando pasará algo que cambiará el destino de esa tierra para siempre…
Milán, primavera de 2015. Un periodista de New York Times está en Milán para un reportaje sobre EXPO 2015: es uno de los consejeros de 48 años antes y la historia que quiere contar es el mejor ejemplo de como Nutrir el Planeta. Habla de un hombre y de su obra mayor, algo de muy parecido a la Gran Selva de 2500 años atrás…
De ahí empieza el viaje en el tiempo a través de la historia de Milán y de su tierra, desde la fundación de los Celtas bajo el nombre de Medhelan (lugar sagrado) hasta el presente, con personajes históricos reales y personajes de fantasía que pertenecen al reino animal y vegetal, testigos de la transformación que la tierra sufrió durante los siglos y de la larga lucha entre Naturaleza y Civilización, desde que la conexión Hombre-Cosmos-Naturaleza se rompió. Y así junto al rey celta Belloveso, de Federico Barbarroja, Francesco Sforza, Ludovico Sforza y de un inédito Leonardo da Vinci conocemos también a Etherna, el roble depositario de la sabiduría milenaria, Asio, el búho sabio jefe de la Gran Selva junto a su fiel cuervo Barón Rook y Apodeus, el ratón marrón que con su astucia derrota a las ratas negras y con ellos la peste.
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