La autora refiere cómo eran los pueblos de la Baixa Limia, donde creció y vivió, antes de ser inundados en 1992 por el embalse del salto portugués de Lindoso. Los vecinos se negaban a dejar sus casas, el Salto cerró las compuertas mientras dormían y el agua inundó los pueblos. Dicho valle pertenece al Parque Natural del Xures y fue inmolado en nombre del progreso, como otros, sin beneficios para Galicia.
Recientemente, el embalse quedó sin agua y asomaron los esqueletos de las casas sumergidas. Los vecinos lloraron al ver el estado de sus casas y del entorno porque en Galicia, céltica y minifundista, el campesinado tiene una relación afectiva y apego ancestral a la tierra.
La añoranza y los sentimientos de los lugareños, las preguntas de los visitantes y de personas que han oído hablar de este valle con nostalgia, impulsaron a la autora a bucear en sus recuerdos y tratar de rescatarlo para el futuro por medio del lenguaje.
El libro MEMORIAS DEL RÍO DEL OLVIDO describe los pueblos de Aceredo, Reloeira, Bao, Buscalque y otros parajes del hermoso valle del mítico río Limia antes de ser inundados. También cuenta las venturas y desventuras de la autora, así como las de su familia, cuyo caserío, La Malleta, también fue anegado.
Describe el paisaje con realismo poético y mágico, cuenta historias y leyendas, relata sucesos tristes y alegres, anécdotas divertidas y conversaciones políticas escuchadas por la autora siendo niña, en un estilo que fluye natural como antes el agua de este río.
El relato tiene interés histórico, político y social. Se narran sucesos acaecidos en esta zona durante la Guerra y la Postguerra. Se denuncian hechos infames, no a personas, por estimar que no conviene para la paz y la convivencia despertar rencores. Damos protagonismo a gente sencilla, héroes y heroínas anónimos, quienes durante la Guerra Civil española, por compasión y sentimientos humanitarios, sin tener en cuenta la ideología, arriesgaron su vida para salvar la de otros seres humanos.
Estimado lector, te invito a asistir a la resurrección de este edén perdido, lograda según algunos, desde el recuerdo y por la palabra. Si me acompañas disfrutarás de hermosos paisajes rurales, te llevaré al molino, escucharás el rumor del agua, verás cascadas de espuma saltando la presa y presenciarás como el viejo río se desliza majestuoso hacia el ocaso arrastrando su manto de armiño plateado.
Me acompañarás por veredas y senderos solitarios para asistir a una singular academia itinerante; a la salida correrás conmigo huyendo de un asesino, del lobo y de los fantasmas. Te percatarás de las condiciones ínfimas en que estudiamos y vivimos en aquellos años de miseria y penuria. Tiempo después, me acompañarás en bicicleta camino de la escuela de Buscalque de la que fui maestra. En el recorrido oirás el canto de la alondra y del cuco, balidos de ovejas y cabras, y ladridos de perro controlando al rebaño. Verás a una mujer fulminada por un rayo mientras segaba. Escaparás de María Cucú, joven demente, que nos perseguía a los alumnos y a mí con una tranca.
Conocerás a los lugareños, sus casas, escuelas, pasatiempos insólitos, costumbres y modos de vida. También te sorprenderán la organización y tretas del contrabando y los relatos de maquis.
Aprendí a nadar en el Limia, llamado por los romanos, río del Olvido, crucé muchas veces de orilla a orilla y me percaté de que las márgenes, izquierda y derecha, parecían distintas según mirase desde uno u otro lado. Entonces nadé por el medio, desde allí vi bondad y perfidia en ambos lados. Después subí al puente y contemplé desde el centro la hermosa e imparcial visión panorámica que pretendo transmitir en este libro.
Imágenes, emociones y vivencias emergen del subconsciente y se reflejan sutilmente en la superficie del agua. Inesperados guiños de humor, parajes bucólicos, historias sorprendentes te harán sentir, vibrar, reír, llorar, tal vez jurar si lees mi libro
Alba Paz
Recientemente, el embalse quedó sin agua y asomaron los esqueletos de las casas sumergidas. Los vecinos lloraron al ver el estado de sus casas y del entorno porque en Galicia, céltica y minifundista, el campesinado tiene una relación afectiva y apego ancestral a la tierra.
La añoranza y los sentimientos de los lugareños, las preguntas de los visitantes y de personas que han oído hablar de este valle con nostalgia, impulsaron a la autora a bucear en sus recuerdos y tratar de rescatarlo para el futuro por medio del lenguaje.
El libro MEMORIAS DEL RÍO DEL OLVIDO describe los pueblos de Aceredo, Reloeira, Bao, Buscalque y otros parajes del hermoso valle del mítico río Limia antes de ser inundados. También cuenta las venturas y desventuras de la autora, así como las de su familia, cuyo caserío, La Malleta, también fue anegado.
Describe el paisaje con realismo poético y mágico, cuenta historias y leyendas, relata sucesos tristes y alegres, anécdotas divertidas y conversaciones políticas escuchadas por la autora siendo niña, en un estilo que fluye natural como antes el agua de este río.
El relato tiene interés histórico, político y social. Se narran sucesos acaecidos en esta zona durante la Guerra y la Postguerra. Se denuncian hechos infames, no a personas, por estimar que no conviene para la paz y la convivencia despertar rencores. Damos protagonismo a gente sencilla, héroes y heroínas anónimos, quienes durante la Guerra Civil española, por compasión y sentimientos humanitarios, sin tener en cuenta la ideología, arriesgaron su vida para salvar la de otros seres humanos.
Estimado lector, te invito a asistir a la resurrección de este edén perdido, lograda según algunos, desde el recuerdo y por la palabra. Si me acompañas disfrutarás de hermosos paisajes rurales, te llevaré al molino, escucharás el rumor del agua, verás cascadas de espuma saltando la presa y presenciarás como el viejo río se desliza majestuoso hacia el ocaso arrastrando su manto de armiño plateado.
Me acompañarás por veredas y senderos solitarios para asistir a una singular academia itinerante; a la salida correrás conmigo huyendo de un asesino, del lobo y de los fantasmas. Te percatarás de las condiciones ínfimas en que estudiamos y vivimos en aquellos años de miseria y penuria. Tiempo después, me acompañarás en bicicleta camino de la escuela de Buscalque de la que fui maestra. En el recorrido oirás el canto de la alondra y del cuco, balidos de ovejas y cabras, y ladridos de perro controlando al rebaño. Verás a una mujer fulminada por un rayo mientras segaba. Escaparás de María Cucú, joven demente, que nos perseguía a los alumnos y a mí con una tranca.
Conocerás a los lugareños, sus casas, escuelas, pasatiempos insólitos, costumbres y modos de vida. También te sorprenderán la organización y tretas del contrabando y los relatos de maquis.
Aprendí a nadar en el Limia, llamado por los romanos, río del Olvido, crucé muchas veces de orilla a orilla y me percaté de que las márgenes, izquierda y derecha, parecían distintas según mirase desde uno u otro lado. Entonces nadé por el medio, desde allí vi bondad y perfidia en ambos lados. Después subí al puente y contemplé desde el centro la hermosa e imparcial visión panorámica que pretendo transmitir en este libro.
Imágenes, emociones y vivencias emergen del subconsciente y se reflejan sutilmente en la superficie del agua. Inesperados guiños de humor, parajes bucólicos, historias sorprendentes te harán sentir, vibrar, reír, llorar, tal vez jurar si lees mi libro
Alba Paz