Cuatro jóvenes mexicas reman entre los largos tulares que rodean su pobre ciudad. Sólo tienen para comer víboras, insectos y huevos de mosco que preparan con el poco maíz que pueden comprar a sus celosos vecinos y señores, los tepanecas de Azcapotzalco. Y aunque los mexicas sufren ofensas y castigos, será gracias a estos jóvenes que la historia de su pueblo está por cambiar, porque de ser un pueblo esclavizado, ahora pasará a ser el escogido por Huitzilopochtli para proteger al Quinto Sol.
Mexicas, el pueblo elegido nos conduce por los convulsos años en los que Tenochtitlan dejará de ser una ciudad asediada para convertirse en la capital del mundo prehispánico. Con gran maestría, Jaime Montell nos aclara el nacimiento del poderoso imperio mexica y nos presenta con sorprendente calidez a hombres como Itzcóatl, Moctezuma Ilhuicamina, Nezahualcóyotl, Axayácatl y, encima de todos ellos, la mítica figura de Tlacaélel, considerado por la historia reciente como el hombre que soñó al imperio mexica y le dio las bases que lo llevaron a la gloria.
Esta novela, que nos ilustra e ilumina, relata quizá la más olvidada pero a la vez la más importante etapa de nuestra historia: la gran lucha por la construcción de un imperio.
Mexicas, el pueblo elegido nos conduce por los convulsos años en los que Tenochtitlan dejará de ser una ciudad asediada para convertirse en la capital del mundo prehispánico. Con gran maestría, Jaime Montell nos aclara el nacimiento del poderoso imperio mexica y nos presenta con sorprendente calidez a hombres como Itzcóatl, Moctezuma Ilhuicamina, Nezahualcóyotl, Axayácatl y, encima de todos ellos, la mítica figura de Tlacaélel, considerado por la historia reciente como el hombre que soñó al imperio mexica y le dio las bases que lo llevaron a la gloria.
Esta novela, que nos ilustra e ilumina, relata quizá la más olvidada pero a la vez la más importante etapa de nuestra historia: la gran lucha por la construcción de un imperio.