Miedos

La realidad en ocasiones se esconde en los humores de quienes la percibimos, para brotar después en cada quien de acuerdo a esa manera única de asimilar un suceso dado, en un determinado momento de nuestras vidas. Un hecho trascendente puede ser cotejado de acuerdo a los recursos que seamos capaces de desplegar en el instante mismo en que está aconteciendo; y como tal quedar grabado en nuestra psiquis, para después ser contado bajo el matiz de una subjetividad inconsciente pero presente. El libro que les presento, pretende entre otras cosas comentar, sacar a colación, pero en ningún caso erigirse como suceso real; aunque muchos de los aspectos que son abordados en el mismo hayan sido sacados de los acontecimientos mismos. Por lo tanto estamos ante una ficción que pretende abarcar entre otras cosas la manera de comportarse de un grupo de personas en una situación dada, y los trasfondos que en ocasiones se hacen protagónicos sin habérnoslo propuesto. La visita de Benedictus XVI a Cuba tres años atrás es el escenario para mostrar una realidad que palpita con cada uno de sus personajes. Además el pretexto para narrar tres historias que se entrecruzan, con la particularidad de tener al miedo como protagonista, y para que al final todo se diluya en una suerte de apocalipsis tropical con ramificaciones que hasta el día de hoy quizás no se conozca su verdadero alcance. Alrededor del mundo se crearon un sinfín de especulaciones, expectativas de toda índole que venían de los lugares más equidistantes posibles, para después de cierta manera eclipsarse, quitarse de las mentes de las multitudes así como por encanto, o como si hubiera sido borrado del panorama por esa misma entidad que envió la lluvia caída en los últimos momentos de la estancia de su Santidad en territorio cubano. En la actualidad muy poco se comenta del tema, si bien a partir de esa fecha han tenido lugar grandes cambios, ya sea en el Vaticano como en la misma Isla de Cuba.