No tengo tiempo» es el slogan del siglo XXI y estoy cansada de oírlo. No quiero oír esta excusa ni una vez más, y menos saliendo de ti.
La falta de tiempo es el argumento más utilizado en la actualidad para no hacer, no emprender, no viajar, no conocer, no dialogar, no participar, no ayudar,… y un montón de otras cosas que no estás haciendo por escudarte en la falta de tiempo.
Cuando dices que no tienes tiempo, en realidad estás diciendo que te gustaría cambiar pero seguir igual. Te gustaría aprender inglés o macramé, pero sin cambiar ni una pizca lo que estás haciendo hoy. No quieres sacrificar ninguna de las actividades que estás haciendo para hacerle un hueco a las actividades que te gustaría hacer, las que darían sentido a tu vida.
Resulta que no tienes tiempo para salir a caminar, aprender chino, o meditar, pero sí tienes tiempo para pasar el rato en un atasco o ver la final de la Champions en televisión. Sí, lo de estar en un atasco también ha sido decisión tuya y también lo puedes cambiar.
¿Sabes quién no se queja de la falta de tiempo? El que ha decido tomar las riendas de su vida.
La falta de tiempo es el argumento más utilizado en la actualidad para no hacer, no emprender, no viajar, no conocer, no dialogar, no participar, no ayudar,… y un montón de otras cosas que no estás haciendo por escudarte en la falta de tiempo.
Cuando dices que no tienes tiempo, en realidad estás diciendo que te gustaría cambiar pero seguir igual. Te gustaría aprender inglés o macramé, pero sin cambiar ni una pizca lo que estás haciendo hoy. No quieres sacrificar ninguna de las actividades que estás haciendo para hacerle un hueco a las actividades que te gustaría hacer, las que darían sentido a tu vida.
Resulta que no tienes tiempo para salir a caminar, aprender chino, o meditar, pero sí tienes tiempo para pasar el rato en un atasco o ver la final de la Champions en televisión. Sí, lo de estar en un atasco también ha sido decisión tuya y también lo puedes cambiar.
¿Sabes quién no se queja de la falta de tiempo? El que ha decido tomar las riendas de su vida.