El abuelo José era panadero y se levantaba muy temprano a trabajar. Al llegar a casa, ya estaba demasiado cansado para jugar con sus nietas, Elsa y Ana, que vivían con él y con la abuela. Sin embargo, llegó el día en que cumplió 65 años, la edad para dejar de trabajar. El abuelo les explicó a las niñas la importancia de haber ahorrado durante su vida para poder tener dinero ahora, que ya no trabajaría más. Desde ese día, el abuelo tuvo tiempo para hacer las cosas que le gustaban, para salir a pasear con sus nietas y disfrutar la vida.
Este cuento pertenece a la colección “Aprendiendo a ahorrar”, que es un proyecto organizado y financiado por AIOS (Asociación Internacional de Organismos de Supervisión de Fondos de Pensiones) en el que se escogieron 8 cuentos de distintos países latinoamericanos escritos por niños para niños, con la finalidad de incentivar el ahorro. Los textos ayudan a los pequeños a tener conciencia del futuro y de la importancia del ahorro, a saber disfrutar de lo que se tiene pero también a cuidarlo, para no quedarse sin nada para cuando se pueda necesitar.
Este cuento pertenece a la colección “Aprendiendo a ahorrar”, que es un proyecto organizado y financiado por AIOS (Asociación Internacional de Organismos de Supervisión de Fondos de Pensiones) en el que se escogieron 8 cuentos de distintos países latinoamericanos escritos por niños para niños, con la finalidad de incentivar el ahorro. Los textos ayudan a los pequeños a tener conciencia del futuro y de la importancia del ahorro, a saber disfrutar de lo que se tiene pero también a cuidarlo, para no quedarse sin nada para cuando se pueda necesitar.