La Nutrición simbiótica es una adaptación de la Microbiótica, como movimiento de defensa cultural de los microorganismos regeneradores, aplicada a la salud humana a través de la alimentación. Contempla los alimentos como una fuente de salud para nuestro organismo, partiendo de que somos un Holosimbionte indivisible o conjunto de sistemas vivos en comunión simbiótica, dentro del cual hay un genoma humano y un microbioma no humano. Se enfoca en alimentar tanto nuestras células humanas como los micoorganismos que llevamos dentro y fuera de nuestra piel. Si nuestra microbiota intestinal está equilibrada tendremos una salud estupenda y un sistema inmunológico preparado para afrontar cualquier agresión.
La nutrición simbiótica busca despertar el poder oculto de la autosanación que todos llevamos dentro y que en gran medida depende de la interacción armónica entre las células humanas y microbios regeneradores que configuran nuestro cuerpo. Es, por tanto, una estrategia para ayudar tanto a personas enfermas como sanas en su proceso de evolución hacia una conciencia mas amplia de lo que somos.
La nutrición simbiótica busca despertar el poder oculto de la autosanación que todos llevamos dentro y que en gran medida depende de la interacción armónica entre las células humanas y microbios regeneradores que configuran nuestro cuerpo. Es, por tanto, una estrategia para ayudar tanto a personas enfermas como sanas en su proceso de evolución hacia una conciencia mas amplia de lo que somos.