Consigue estos dos fantásticos ebooks a un precio excepcional.
Atrae el dinero con la ley de la atracción
Ximo Despuig
En este libro, basado en los artículos de Steve Pavlina, (un hombre que levantó un negocio millonario de autosuperación de la nada por el método de la entrega de valor al lector) descubrirás que el verdadero motivo por el que nos cuesta tanto ganar mucho dinero es porque no nos creemos merecedores de ello. La buena noticia es que hay métodos para romper las costumbres arraigadas y atraer la abundancia a nuestras vidas. Uno de esos métodos es la Ley de la Atracción.
Descubre de qué manera Steve rompió sus propias barreras y después... hazlo tú.
+
500 Chistes para partirse el ajete
Berto Pedrosa
Incluye los siguientes volúmenes:
- 100 Chistes para partirse el ajete
- Otros 100 Chistes para partirse el ajete
- Y aún otros 100 Chistes más para partirse el ajete
- Pues aún quedaban otros 100 Chistes buenos para partirse el ajete
- 100 Chistes inesperados para partirse el ajete
—Dígame cuatro palabras en inglés.
—Metro, Goldwyn, Mayer.
—¿Y la cuarta?
—¡Grrrrrrr!
—¿Nivel de inglés?
—Alto.
—Diga “arriba en estas ciudades”.
—Up in these cities.
—Haga una frase.
—Me han operado de up in these cities.
—Mi capitán, ¿sabe usted dónde está el cabo Finisterre?
—¡Pero cómo puede ser usted tan burro! ¡Está en La Coruña!
—Bueno. Vale. Pero no hace falta que se ponga así. No sabía que estaba de permiso.
Un chino en la puerta de un hospital. Se le acerca un médico.
—¿Tiene algún problema, señor? ¿Acaso está enfermo? Soy médico.
El chino se vuelve para mirar al médico y, con una sonrisa de oreja a oreja, le contesta:
—No, doctol, muchas glacias; no me pasa nada. Sólo estoy viendo el local.
—¿Ha leído el maestro tu redacción, Francisco?
—Sí. Creo que se ha conmovido.
—¿Ah,sí?¿Y eso?
—Ha dicho que daba pena.
—¿Sabe usted inglés?
—Sí.
—Traduzca “en el autobús”.
—On the bus.
—Úselo en una frase.
—¿On the bus tan guapa?
—Eres un egocéntrico.
—¿Yo? ¡Pues anda que yo!
—Bien la presentación, pero en tu plato echo en falta originalidad y coherencia en la idea.
—Paco, por Dios, cómete las malditas lentejas.
La mujer al marido:
—Estoy embarazada. ¿Qué quieres que sea?
—Mío estaría bien.
Una señora a otra.
—No puedo comer carne.
—¿Tensión alta?
—Pensión baja.
El profesor a un alumno.
—Estás expulsado del equipo de paracaidismo.
—¿Por qué?
—Porque no me caes bien.
—¡Mamá, mamá! ¿Qué es la apatía?
—¿Y qué más da? Todos nos vamos a morir.
—Mi hijo está yendo a clases de natación.
—¿Ah, sí? ¿Y que tal lo hace?
—Pues por ahora nada mal.
¿En qué se parece un hombre a un helicóptero?
En que el hombre tiene sesos y el helicóptero se sostiene.
Un amigo a otro.
—¿Cuántos cornudos te parece que viven en esta calle sin contarte a ti?
—¡Cómo sin contarme a mí! ¡Eso es un insulto!
—Bueno, no te enfades. Vamos, contándote a ti… ¿cuántos te parece que hay?
Y así hasta 500 :)
Cómpralo, los dos libros son totales.
Atrae el dinero con la ley de la atracción
Ximo Despuig
En este libro, basado en los artículos de Steve Pavlina, (un hombre que levantó un negocio millonario de autosuperación de la nada por el método de la entrega de valor al lector) descubrirás que el verdadero motivo por el que nos cuesta tanto ganar mucho dinero es porque no nos creemos merecedores de ello. La buena noticia es que hay métodos para romper las costumbres arraigadas y atraer la abundancia a nuestras vidas. Uno de esos métodos es la Ley de la Atracción.
Descubre de qué manera Steve rompió sus propias barreras y después... hazlo tú.
+
500 Chistes para partirse el ajete
Berto Pedrosa
Incluye los siguientes volúmenes:
- 100 Chistes para partirse el ajete
- Otros 100 Chistes para partirse el ajete
- Y aún otros 100 Chistes más para partirse el ajete
- Pues aún quedaban otros 100 Chistes buenos para partirse el ajete
- 100 Chistes inesperados para partirse el ajete
—Dígame cuatro palabras en inglés.
—Metro, Goldwyn, Mayer.
—¿Y la cuarta?
—¡Grrrrrrr!
—¿Nivel de inglés?
—Alto.
—Diga “arriba en estas ciudades”.
—Up in these cities.
—Haga una frase.
—Me han operado de up in these cities.
—Mi capitán, ¿sabe usted dónde está el cabo Finisterre?
—¡Pero cómo puede ser usted tan burro! ¡Está en La Coruña!
—Bueno. Vale. Pero no hace falta que se ponga así. No sabía que estaba de permiso.
Un chino en la puerta de un hospital. Se le acerca un médico.
—¿Tiene algún problema, señor? ¿Acaso está enfermo? Soy médico.
El chino se vuelve para mirar al médico y, con una sonrisa de oreja a oreja, le contesta:
—No, doctol, muchas glacias; no me pasa nada. Sólo estoy viendo el local.
—¿Ha leído el maestro tu redacción, Francisco?
—Sí. Creo que se ha conmovido.
—¿Ah,sí?¿Y eso?
—Ha dicho que daba pena.
—¿Sabe usted inglés?
—Sí.
—Traduzca “en el autobús”.
—On the bus.
—Úselo en una frase.
—¿On the bus tan guapa?
—Eres un egocéntrico.
—¿Yo? ¡Pues anda que yo!
—Bien la presentación, pero en tu plato echo en falta originalidad y coherencia en la idea.
—Paco, por Dios, cómete las malditas lentejas.
La mujer al marido:
—Estoy embarazada. ¿Qué quieres que sea?
—Mío estaría bien.
Una señora a otra.
—No puedo comer carne.
—¿Tensión alta?
—Pensión baja.
El profesor a un alumno.
—Estás expulsado del equipo de paracaidismo.
—¿Por qué?
—Porque no me caes bien.
—¡Mamá, mamá! ¿Qué es la apatía?
—¿Y qué más da? Todos nos vamos a morir.
—Mi hijo está yendo a clases de natación.
—¿Ah, sí? ¿Y que tal lo hace?
—Pues por ahora nada mal.
¿En qué se parece un hombre a un helicóptero?
En que el hombre tiene sesos y el helicóptero se sostiene.
Un amigo a otro.
—¿Cuántos cornudos te parece que viven en esta calle sin contarte a ti?
—¡Cómo sin contarme a mí! ¡Eso es un insulto!
—Bueno, no te enfades. Vamos, contándote a ti… ¿cuántos te parece que hay?
Y así hasta 500 :)
Cómpralo, los dos libros son totales.