Tras el clamoroso éxito del Diccionario irónico- filosófico de máximas y mínimas, nº 1 de ventas en la sección de filosofía de Amazon; y de su primera y celebrada novela La ambición de Norman Roy, Antonio Íñiguez Escobar y su alter ego vuelven a desatar la emoción, la carcajada, la reflexión y también -por qué no confesarlo- la ira del lector no avisado, que acude a sus citas o aforismos para encontrar una rápida respuesta a sus dudas vitales. Quien se asome a estas páginas puede acabar encontrando también un par de bofetadas de ida y vuelta con la mano abierta, como en una película cómica, cuando Íñiguez y Roy desnuden sus contradicciones.
Si usted lo tiene todo muy claro en la vida, mejor no tome este libro entre sus manos, para no empezar a ver todo borroso o de un color distinto al que había percibido. Y recuerde que “Los amigos nacen, crecen, se casan y desaparecen”. Palabra de Norman Roy.
Si usted lo tiene todo muy claro en la vida, mejor no tome este libro entre sus manos, para no empezar a ver todo borroso o de un color distinto al que había percibido. Y recuerde que “Los amigos nacen, crecen, se casan y desaparecen”. Palabra de Norman Roy.