“Ana Martos describe las vidas y peripecias de éstas con la amenidad habitual, sin aburrir ni impacientar al lector utilizando para ello un lenguaje claro y muy accesible para todo tipo de lectores, aunque no estén familiarizados con la historia de la Iglesia o del catolicismo y desarrollando su exposición a través de capítulos muy breves, que se leen muy bien.”(Web Anika entre libros)
La Iglesia católica ha orillado sistemáticamente el papel de la mujer, tanto en la liturgia como en la toma de decisiones, pero al largo de la historia han existido mujeres que han conseguido que su voz se oyera y sus órdenes se obedeciesen.
La mujer ha sido relegada a un segundo plano, un plano de servidumbre, en el catolicismo desde sus orígenes, ya San Pablo indica que la mujer no puede intervenir de modo activo en cuestiones de fe. Pero entre los siglos IV y XI la Iglesia católica vivió un periodo caótico en el que el poder estuvo, en la mayoría de los casos, en manos de paganos con un poder absoluto, esta circunstancia fue aprovechada por las mujeres retratadas en Papisas y teólogas para convocar concilios y proclamar dogmas de fe, para nombrar y deponer papas o para causar quebraderos de cabeza a los papas y padres conciliares. En modo directo e indirecto estas mujeres rigieron el destino del catolicismo de su época y determinaron las creencias de su época.
Conoceremos la historia de Gala Placidia, de Pulqueria y de Teodora que, en su calidad de emperatrices, rigieron los destinos de la Iglesia entre los siglos IV y V; asistiremos a la insólita historia, negada por la Iglesia pero avalada por numerosos testimonios, de la papisa Juana que fue descubierta porque dio a luz en una procesión; el relato de Marozia y Teodora que, como senadoras romanas, manipularon a placer el rumbo del catolicismo, no dudando incluso en asesinar a aquellos que se opusieron a sus deseos, los herederos de Marozia convirtieron el palacio papal en un lupanar y la tiara en un objeto de compra y venta; pero también veremos la lucha de Irene y Teodora por restituir el culto a las imágenes o la influencia de Clotilde y Teodolinda que convirtieron a su pueblo al cristianismo. Todas estas historias son presentadas por Ana Martos de un modo riguroso pero en un estilo dinámico y, en ocasiones, vertiginoso.
Razones para comprar la obra:
- La obra muestra una información fundamental y desconocida sobre la influencia de las mujeres en la historia política de occidente.
- Aclara la verdad sobre la promulgación de varios dogmas de fe que aún tienen vigor y que dieron lugar a concilios ecuménicos.
- La autora se sumerge en la historia de la Iglesia entre los siglos IV y el XI, lo que se ha llamado la época oscura de la historia de la Iglesia católica.
- Es una obra reveladora que revisa el papel de la mujer en la Iglesia actual mostrando el papel de la misma a lo largo de la historia, un papel que, lejos de ser secundario ha sido determinante en muchos momentos de la historia.
Las mujeres han ejercido su influencia en la historia de modo directo o influyendo sobre los hombres poderosos de la época, pero su incidencia en el desarrollo de la cristiandad ha sido innegable y esta obra muestra, desde el riguroso dato histórico, dicha influencia.