Nueva obra de la autora de DESEADA, ebook bestseller en erótica.
Advertencia: "Pillada in fraganti: La venganza" tiene un alto contenido de escenas de sexo.
"Pillada in fraganti: La venganza" tiene una extensión de 21.800 palabras y es el cuarto de una serie de cuatro ebooks: La detective, La clienta, El asesino, La venganza.
Está disponible también en un tomo único: "Pillada in fraganti".
Sinopsis:
Malena trabaja como detective en Barcelona y se ve envuelta en una trama de corrupción donde una de las víctimas es alguien a quien conoce demasiado bien.
Dylan es un policía que está llevando a cabo una venganza a sangre fría y que se siente atraído por la detective que intenta capturarlo.
Excepto por sus escenas eróticas, no se recomienda leer "Pillada in fraganti: La venganza" sin haber leído los tres ebooks anteriores.
Extractos:
"—Túmbate, no pesas tanto —le sugirió ella, deseando sentir su cuerpo contra el suyo propio, toda su libido despertada otra vez de golpe.
—Llevo demasiada ropa, ¿qué tal si me la quitas?
—Eso es fácil.
—Entonces, detective, hagamos que no lo sea tanto.
Hubo algo en el timbre de su voz que hizo que Malena se estremeciera de anticipación. Porque conocía a su amante y le encantaba cuando jugaba con ella."
"Se trataba de la unión de sus dos sexos, a pocos centímetros bajo el nivel de la poza. Ver cómo su miembro salía casi por completo de ese coño empapado y abierto, que la escasa luz y el agua le dieran a esa imagen un toque todavía más erótico, estar sintiendo en su misma polla cómo se la metía, cómo se introducía en esa vagina cuyos labios exteriores veía abrirse... era algo tan puñeteramente excitante que lo estaba llevando al límite".
"Escuchó los sonidos de los demás motores al arrancar e irse y comenzó a jurar para sí. ¡Joder! ¿Y si la acababa de cagar? ¿Y si debería haberse ido? ¿Y si ahora hacían recuento de los coches de los del local, se daban cuenta de que el suyo no era uno de ellos y la sacaban de allí a punta de pistola?
¡Maldita fuera!
¿Por qué cojones tenía que meterse en esos berenjenales?
“Por Eva”, recordó.
Y siguió allí, inmóvil y asustada, escuchando lo que ocurría a su alrededor pues le iba la vida en ello".
"—No tienes cojones, zorra —le escupió él. —Tú no eres una asesina, no vas a poder con una muerte a sangre fría".
Advertencia: "Pillada in fraganti: La venganza" tiene un alto contenido de escenas de sexo.
"Pillada in fraganti: La venganza" tiene una extensión de 21.800 palabras y es el cuarto de una serie de cuatro ebooks: La detective, La clienta, El asesino, La venganza.
Está disponible también en un tomo único: "Pillada in fraganti".
Sinopsis:
Malena trabaja como detective en Barcelona y se ve envuelta en una trama de corrupción donde una de las víctimas es alguien a quien conoce demasiado bien.
Dylan es un policía que está llevando a cabo una venganza a sangre fría y que se siente atraído por la detective que intenta capturarlo.
Excepto por sus escenas eróticas, no se recomienda leer "Pillada in fraganti: La venganza" sin haber leído los tres ebooks anteriores.
Extractos:
"—Túmbate, no pesas tanto —le sugirió ella, deseando sentir su cuerpo contra el suyo propio, toda su libido despertada otra vez de golpe.
—Llevo demasiada ropa, ¿qué tal si me la quitas?
—Eso es fácil.
—Entonces, detective, hagamos que no lo sea tanto.
Hubo algo en el timbre de su voz que hizo que Malena se estremeciera de anticipación. Porque conocía a su amante y le encantaba cuando jugaba con ella."
"Se trataba de la unión de sus dos sexos, a pocos centímetros bajo el nivel de la poza. Ver cómo su miembro salía casi por completo de ese coño empapado y abierto, que la escasa luz y el agua le dieran a esa imagen un toque todavía más erótico, estar sintiendo en su misma polla cómo se la metía, cómo se introducía en esa vagina cuyos labios exteriores veía abrirse... era algo tan puñeteramente excitante que lo estaba llevando al límite".
"Escuchó los sonidos de los demás motores al arrancar e irse y comenzó a jurar para sí. ¡Joder! ¿Y si la acababa de cagar? ¿Y si debería haberse ido? ¿Y si ahora hacían recuento de los coches de los del local, se daban cuenta de que el suyo no era uno de ellos y la sacaban de allí a punta de pistola?
¡Maldita fuera!
¿Por qué cojones tenía que meterse en esos berenjenales?
“Por Eva”, recordó.
Y siguió allí, inmóvil y asustada, escuchando lo que ocurría a su alrededor pues le iba la vida en ello".
"—No tienes cojones, zorra —le escupió él. —Tú no eres una asesina, no vas a poder con una muerte a sangre fría".