La IH – intolerancia a la histamina – es una condición que afecta a
muchas personas pero en general no es diagnosticada. A las personas
que la padecen, puede hacerles la vida verdaderamente miserable. Pero
SÍ se puede controlar con un DIAGNÓSTICO ADECUADO y con una
DIETA ADECUADA.
La autora Genny Masterman conoce la IH por experiencia
personal. Explica cómo reconocerla, como obtener un diagnóstico
adecuado y cómo aprender a vivir con ella. Genny recuperó su vida y
ahora quiere ayudar a otros que sufren de IH a volver a disfrutar de las
suyas.
Las personas con IH frecuentemente:
sufren de dolores estomacales y problemas intestinales, migrañas, cansancio y problemas
dermatológicos;
tienen síntomas que son muy parecidos a una alergia;
reaccionan mal al vino tinto, a los quesos muy madurados, a los embutidos, tomates y alimentos
fermentados;
van a ver a su médico generalista quejándose de síntomas relacionados con alimentos, pero el
médico no logra encontrar la causa exacta;
son considerados como enfermizos por las personas a su alrededor;
no logran encontrar con precisión lo que les está causando molestias.
Las personas con IH pueden:
cambiar y ajustar sus regímenes alimenticios para lograr un modo de vida saludable hecho a su medido;
recuperar su energía; • controlar sus síntomas;
reducir lo más posible sus visitas de emergencia al médico;
lograr que sus familias y amigos se preocupen menos de ellos;
aprender a cuidarse mejor;
¡RECUPERAR SUS VIDAS Y DISFRUTARLAS MUCHO MÁS!
muchas personas pero en general no es diagnosticada. A las personas
que la padecen, puede hacerles la vida verdaderamente miserable. Pero
SÍ se puede controlar con un DIAGNÓSTICO ADECUADO y con una
DIETA ADECUADA.
La autora Genny Masterman conoce la IH por experiencia
personal. Explica cómo reconocerla, como obtener un diagnóstico
adecuado y cómo aprender a vivir con ella. Genny recuperó su vida y
ahora quiere ayudar a otros que sufren de IH a volver a disfrutar de las
suyas.
Las personas con IH frecuentemente:
sufren de dolores estomacales y problemas intestinales, migrañas, cansancio y problemas
dermatológicos;
tienen síntomas que son muy parecidos a una alergia;
reaccionan mal al vino tinto, a los quesos muy madurados, a los embutidos, tomates y alimentos
fermentados;
van a ver a su médico generalista quejándose de síntomas relacionados con alimentos, pero el
médico no logra encontrar la causa exacta;
son considerados como enfermizos por las personas a su alrededor;
no logran encontrar con precisión lo que les está causando molestias.
Las personas con IH pueden:
cambiar y ajustar sus regímenes alimenticios para lograr un modo de vida saludable hecho a su medido;
recuperar su energía; • controlar sus síntomas;
reducir lo más posible sus visitas de emergencia al médico;
lograr que sus familias y amigos se preocupen menos de ellos;
aprender a cuidarse mejor;
¡RECUPERAR SUS VIDAS Y DISFRUTARLAS MUCHO MÁS!