Estas Reflexiones entre amigos recogen la mayoría de las “crónicas” publicadas por Lorenzo Doreste en el Diario de Las Palmas en la época en que su director era Santiago Betancor Brito.
En ellas, el autor nos conduce a recordar la parábola evangélica del fariseo y el publicano. El fariseo está muy de acuerdo con su propia moral, la instituida, por ello se convierte en un fósil incapaz de progresar. En cambio el publicano ve su propia tendencia humana hacia el mal, y esta inquietud marca el comienzo de su progreso moral. El planteamiento constante de lo que es moral o inmoral, justo o injusto, suele ser difícil porque muy pocas personas tienen una conciencia autónoma, forjada mediante reflexiones, al estilo de los filósofos.
En ellas, el autor nos conduce a recordar la parábola evangélica del fariseo y el publicano. El fariseo está muy de acuerdo con su propia moral, la instituida, por ello se convierte en un fósil incapaz de progresar. En cambio el publicano ve su propia tendencia humana hacia el mal, y esta inquietud marca el comienzo de su progreso moral. El planteamiento constante de lo que es moral o inmoral, justo o injusto, suele ser difícil porque muy pocas personas tienen una conciencia autónoma, forjada mediante reflexiones, al estilo de los filósofos.