Shanie es una joven de veintisiete años cuyo aspecto físico es el de una chica de dieciséis. Harta de que nadie se fije en ella, sigue el consejo de sus compañeros de trabajo y comienza a ir a una discoteca de moda.
Desde hace una semana, Wolf no ha perdido de vista a esa criatura que recientemente frecuenta su negocio. Y cada vez le cuesta más dejar de observarla. La atracción que sienten es mutua, pero Wolf, al descubrir que es virgen, se aleja de Shanie por su bien. Un año después no ha podido olvidarla, y cada día se arrepiente más de lo que le hizo. Después de lo sucedido con Wolf, lo único que quiere Shanie es que la dejen en paz. Ella, que siempre había sido alegre, divertida y risueña, se encierra en sí misma para no volver a sufrir nunca más.
Cuando Wolf reaparece en su vida, se propone sacarla de su letargo como sea y recuperar a la Shanie que conoció y de la que se enamoró, aunque para lograrlo tenga que secuestrarla.
Desde hace una semana, Wolf no ha perdido de vista a esa criatura que recientemente frecuenta su negocio. Y cada vez le cuesta más dejar de observarla. La atracción que sienten es mutua, pero Wolf, al descubrir que es virgen, se aleja de Shanie por su bien. Un año después no ha podido olvidarla, y cada día se arrepiente más de lo que le hizo. Después de lo sucedido con Wolf, lo único que quiere Shanie es que la dejen en paz. Ella, que siempre había sido alegre, divertida y risueña, se encierra en sí misma para no volver a sufrir nunca más.
Cuando Wolf reaparece en su vida, se propone sacarla de su letargo como sea y recuperar a la Shanie que conoció y de la que se enamoró, aunque para lograrlo tenga que secuestrarla.