Este libro, a diferencia de los primeros volúmenes aparecidos tras la elección del papa Francisco, pretende ayudar al lector a rezar. De modo que adentrarse en su persona, conocer su pensamiento, resulte aquí secundario. Estas páginas son, sobre todo, una ayuda para hablar con Dios sobre los temas que al Papa le preocupan.
Desde su primera aparición pública puso a rezar a los miles de fieles, que en ese momento le escuchaban expectantes en la Plaza de San Pedro. Primero por el papa emérito Benedicto XVI y, tras pedir oraciones de unos por otros, a orar en silencio por él para que el Señor lo bendijese. Y, antes de despedirse, añadió: "mañana quisiera ir a rezar a la Virgen, para que proteja a toda Roma". Sí, el verbo más empleado en su primera aparición fue este: rezar. Y de ahí que estas páginas quieran responder a ese primer deseo del Pontífice.
Para ello hemos entresacado de todas sus intervenciones públicas desde que fue nombrado cardenal por Juan Pablo II -21 de febrero de 2001- aquellos pasajes que puedan empujarnos y enseñarnos a rezar.
Desde su primera aparición pública puso a rezar a los miles de fieles, que en ese momento le escuchaban expectantes en la Plaza de San Pedro. Primero por el papa emérito Benedicto XVI y, tras pedir oraciones de unos por otros, a orar en silencio por él para que el Señor lo bendijese. Y, antes de despedirse, añadió: "mañana quisiera ir a rezar a la Virgen, para que proteja a toda Roma". Sí, el verbo más empleado en su primera aparición fue este: rezar. Y de ahí que estas páginas quieran responder a ese primer deseo del Pontífice.
Para ello hemos entresacado de todas sus intervenciones públicas desde que fue nombrado cardenal por Juan Pablo II -21 de febrero de 2001- aquellos pasajes que puedan empujarnos y enseñarnos a rezar.