Todo lo que se publica sobre Sean es bueno, no hay críticas despiadadas contra él, y hasta su vida particular, con divorcio incluido, no es objeto de repudio. Por fin hemos encontrado a un actor que no es carnaza para la prensa amarilla.
Muchos aficionados han descubierto a Connery con posterioridad a su época de James Bond y dependiendo de la película que hayan visto así será su entusiasmo o desinterés por él. Por ejemplo, si han visto “Los inmortales”, una película menor en su carrera cinematográfica, encontrarán que se trata de una cinta original que tuvo cierto éxito en el momento de su estreno. Pero si comenten el error de comprar “Los inmortales 2” su decepción será muy grande: la película es sumamente incoherente, Christopher Lambert acapara todas las escenas y Sean Connery se limita a reírse estúpidamente mientras le cortan la cabeza.
Supongamos que decide indagar en la trayectoria de Sean y no sabe cuál es el mejor camino. Nosotros le podíamos aconsejar que viera “El hombre que pudo reinar”, “Robin y Marian” o “Negocios de familia” si es usted un aficionado a las comedias con grandes dosis de humor inglés.
Si le gustan más las películas de intriga, los thrillers, le recomendaríamos “Los intocables de Elliot Ness” o “La casa Rusia”, mientras que si su pasión es por el romance no nos queda más remedio que incluir “Cinco días, un verano” o “El primer caballero”.
Pero quizá pretenda ver a Connery moviéndose en ambientes extraños, casi mágicos, y en ese caso no se pierda “Los héroes del tiempo”, “Zardoz” y “Atmósfera cero”.
De todas maneras lo más probable es que quiera conocer a este legendario actor en su salsa, en donde se movía con más habilidad que Supermán por el aire. Del mismo modo que John Wayne está unido al Western y Clark Gable a “Lo que el viento se llevó”, Connery está vinculado muy a su pesar a Bond, a James Bond.
Para muchos aficionados “Nunca digas nunca jamás” fue el primer "James Bond" filmado que vieron, una película que se hizo nada menos que veintiún años después del estreno de “Agente 007 contra el Dr. No.” y así no hay manera de conseguir que se enganchen a la saga de 007. No es que sea una mala película, es que supone el declive, el final del héroe, y lo mismo que no es correcto que nos presenten a una dama con los rulos puestos, tampoco lo es conocer a Sean Connery cuando tenía 53 años y odiaba tanto a su personaje que deseaba mutilarlo para siempre. Afortunadamente su maestría como actor es tanta que ni voluntariamente consiguió salir mal parado en su propósito y su legión de fans comenzó de nuevo una carrera ascendente vertiginosa.
Muchos aficionados han descubierto a Connery con posterioridad a su época de James Bond y dependiendo de la película que hayan visto así será su entusiasmo o desinterés por él. Por ejemplo, si han visto “Los inmortales”, una película menor en su carrera cinematográfica, encontrarán que se trata de una cinta original que tuvo cierto éxito en el momento de su estreno. Pero si comenten el error de comprar “Los inmortales 2” su decepción será muy grande: la película es sumamente incoherente, Christopher Lambert acapara todas las escenas y Sean Connery se limita a reírse estúpidamente mientras le cortan la cabeza.
Supongamos que decide indagar en la trayectoria de Sean y no sabe cuál es el mejor camino. Nosotros le podíamos aconsejar que viera “El hombre que pudo reinar”, “Robin y Marian” o “Negocios de familia” si es usted un aficionado a las comedias con grandes dosis de humor inglés.
Si le gustan más las películas de intriga, los thrillers, le recomendaríamos “Los intocables de Elliot Ness” o “La casa Rusia”, mientras que si su pasión es por el romance no nos queda más remedio que incluir “Cinco días, un verano” o “El primer caballero”.
Pero quizá pretenda ver a Connery moviéndose en ambientes extraños, casi mágicos, y en ese caso no se pierda “Los héroes del tiempo”, “Zardoz” y “Atmósfera cero”.
De todas maneras lo más probable es que quiera conocer a este legendario actor en su salsa, en donde se movía con más habilidad que Supermán por el aire. Del mismo modo que John Wayne está unido al Western y Clark Gable a “Lo que el viento se llevó”, Connery está vinculado muy a su pesar a Bond, a James Bond.
Para muchos aficionados “Nunca digas nunca jamás” fue el primer "James Bond" filmado que vieron, una película que se hizo nada menos que veintiún años después del estreno de “Agente 007 contra el Dr. No.” y así no hay manera de conseguir que se enganchen a la saga de 007. No es que sea una mala película, es que supone el declive, el final del héroe, y lo mismo que no es correcto que nos presenten a una dama con los rulos puestos, tampoco lo es conocer a Sean Connery cuando tenía 53 años y odiaba tanto a su personaje que deseaba mutilarlo para siempre. Afortunadamente su maestría como actor es tanta que ni voluntariamente consiguió salir mal parado en su propósito y su legión de fans comenzó de nuevo una carrera ascendente vertiginosa.