Lady Palmerstone se sentía tan afortunada al haber contraído matrimonio con un vizconde que no le daba importancia a sus largas ausencias. Lo único que ella desea es un heredero. El vizconde, hombre acostumbrado a servirse de las personas según su conveniencia, decide contratar a alguien para ahorrarle las molestias de llevar a cabo esa tarea.
Gowan Maxwell había llevado una vida de salvaje supervivencia. Cuando el vizconde le encomendó un escandaloso servicio no podía imaginarse que su vida cambiaría por completo.
Su encargo es seducir a lady Palmerstone. Lo que a en un primer momento resulta un perverso acuerdo, termina siendo la clave para que Edyna experimente la libertad de ser ella misma y Gowen descubra la necesidad de amar a una persona y no dejarla jamás, por muy imposible que sea su amor.
Gowan Maxwell había llevado una vida de salvaje supervivencia. Cuando el vizconde le encomendó un escandaloso servicio no podía imaginarse que su vida cambiaría por completo.
Su encargo es seducir a lady Palmerstone. Lo que a en un primer momento resulta un perverso acuerdo, termina siendo la clave para que Edyna experimente la libertad de ser ella misma y Gowen descubra la necesidad de amar a una persona y no dejarla jamás, por muy imposible que sea su amor.