"Shanghai" es la culminación de la trilogía "Territorios ocupados", distintas miradas escénicas sobre el "no lugar", escrita por Peveroni y llevada a escena por la directora uruguaya María Dodera entre los años 2005 y 2011.
La trilogía va desde el problema interno de una familia (Groenlandia), a la de unos seres que coexisten en un aeropuerto (Berlín), hasta llegar a una ciudad entera (Shanghai). El microcosmos deviene macrocosmos. El conflicto cambia por diferentes concepciones en la comprensión del destino, pero es en Shanghai que la enajenación del ser humano alcanza su máxima expresión. Ya no se trata de un determinismo genético ni psicológico que rige las historias personales: ya no hay personas. Lo más parecido son “cuerpos perfectos” a los que se ha implantado “kits de identidad”. Aquello que nos hacía valiosos, únicos e irrepetibles, se diluye en millones de copias.
M y N son dos técnicos contratados para los primeros ensayos de identidad en Shanghai. Se ven envueltos en una intriga entre sus jefes alemanes y funcionarios del partido comunista chino. Deben manipular una serie de kits que están en un centro de distribución. Arturo Lem es su jefe inmediato en los depósitos, un occidental de identidad confusa que trabaja como doble espía. Deciden llegar a la verdad, prueban los kits y descubren que están adulterados y que forman parte de una conspiración para sembrar el caos en las grandes metrópolis y al mismo tiempo detener el plan de las grandes corporaciones estatales.
La trilogía va desde el problema interno de una familia (Groenlandia), a la de unos seres que coexisten en un aeropuerto (Berlín), hasta llegar a una ciudad entera (Shanghai). El microcosmos deviene macrocosmos. El conflicto cambia por diferentes concepciones en la comprensión del destino, pero es en Shanghai que la enajenación del ser humano alcanza su máxima expresión. Ya no se trata de un determinismo genético ni psicológico que rige las historias personales: ya no hay personas. Lo más parecido son “cuerpos perfectos” a los que se ha implantado “kits de identidad”. Aquello que nos hacía valiosos, únicos e irrepetibles, se diluye en millones de copias.
M y N son dos técnicos contratados para los primeros ensayos de identidad en Shanghai. Se ven envueltos en una intriga entre sus jefes alemanes y funcionarios del partido comunista chino. Deben manipular una serie de kits que están en un centro de distribución. Arturo Lem es su jefe inmediato en los depósitos, un occidental de identidad confusa que trabaja como doble espía. Deciden llegar a la verdad, prueban los kits y descubren que están adulterados y que forman parte de una conspiración para sembrar el caos en las grandes metrópolis y al mismo tiempo detener el plan de las grandes corporaciones estatales.