Varios de los cuentos que integran este volumen eran parte del libro Otro cielo, que publicara hace tiempo Rodolfo Alonso Editor. Otro cielo fue secuestrado de las librerías y quemado por orden judicial; eso ocurrió hacia fines de 1975. Ni el editor ni el autor fueron parte de este proceso. La perspicacia del lector los reconocerá sin mayor esfuerzo. El autor por ese entonces era juez nacional en lo civil y ejercía su cargo en la Ciudad de Buenos Aires, y por una resolución administrativa de la Corte Suprema de Justicia fue dejado cesante sin que hubiera sido citado a defenderse. El argumento: el libro era inmoral y quien lo había escrito también lo era, y por lo tanto, no tenía las cualidades para ser juez. Debe hacerse notar que varios de los magistrados que intervinieron en el caso continuaron en sus cargos durante todo el proceso militar sin que las atrocidades que allí se cometieron perturbaran sus límpidas y huecas conciencias.
Los otros cuentos fueron escritos a posteriori y conforman, todos, esta Sinfonía inconclusa, y pretenden ser un modesto homenaje al Bicentenario.
Los otros cuentos fueron escritos a posteriori y conforman, todos, esta Sinfonía inconclusa, y pretenden ser un modesto homenaje al Bicentenario.