Publicado en alemán, español, inglés e italiano. "Travesía a África" ha estado durante casi un año en el Top 10 de Aventuras y Viajes de Amazon Alemania.
Peter Boehm atravesó África en coches a mil por hora, buses destartalados y trenes desvencijados. Casi seis meses, más de 10 000 kilómetros, a través de nueve países: Somalia, Yibuti, Etiopía, Sudán, Chad, Nigeria, Niger, Malí y Senegal.
El viaje fue vertiginoso y enervante, pero nunca aburrido. La gente que conoció era emocionante, rara y conmovedora, pero nunca le dejaban indiferente. En Somalia, Peter Boehm retrató a psiquiatras que tomaban por locos a todos los campesinos, así como a los mismos somalíes e incluso, al final, ¡hasta al propio autor! En Sudán conoció a médicos que devolvían la virginidad a las mujeres; en Chad, a niños de la calle que, al verle, ya le esperaban con sus maletas preparadas para emprender su viaje a Alemania; en Malí, a curanderos tradicionales que eran al mismo tiempo médicos de cabecera y consejeros sentimentales; en Nigeria, a gobernantes tradicionales ante los que sus súbditos se tiraban al suelo y a jueces islámicos que disfrutaban de las flagelaciones que sentenciaban como de un buen vino.
Además Peter Boehm ha retratado las idas y venidas de un europeo en África.
El tono de Peter Boehm es lacónico y libre de cualquier sensiblería. Nunca han leído nada igual sobre África.
Peter Boehm atravesó África en coches a mil por hora, buses destartalados y trenes desvencijados. Casi seis meses, más de 10 000 kilómetros, a través de nueve países: Somalia, Yibuti, Etiopía, Sudán, Chad, Nigeria, Niger, Malí y Senegal.
El viaje fue vertiginoso y enervante, pero nunca aburrido. La gente que conoció era emocionante, rara y conmovedora, pero nunca le dejaban indiferente. En Somalia, Peter Boehm retrató a psiquiatras que tomaban por locos a todos los campesinos, así como a los mismos somalíes e incluso, al final, ¡hasta al propio autor! En Sudán conoció a médicos que devolvían la virginidad a las mujeres; en Chad, a niños de la calle que, al verle, ya le esperaban con sus maletas preparadas para emprender su viaje a Alemania; en Malí, a curanderos tradicionales que eran al mismo tiempo médicos de cabecera y consejeros sentimentales; en Nigeria, a gobernantes tradicionales ante los que sus súbditos se tiraban al suelo y a jueces islámicos que disfrutaban de las flagelaciones que sentenciaban como de un buen vino.
Además Peter Boehm ha retratado las idas y venidas de un europeo en África.
El tono de Peter Boehm es lacónico y libre de cualquier sensiblería. Nunca han leído nada igual sobre África.