Manjar sublime, vianda divina, noble excrecencia térrea…, nunca faltan apelativos que ensalcen al diamante negro de la gastronomía.
La trufa negra es una auténtica rareza gastronómica que misteriosamente eclosiona apartada de la luz del sol en un renuncio a la fuente de la vida. Conocida y disfrutada por unos pocos elegidos durante centurias y poco habitual en los recetarios de los últimos tiempos, llega al tercer milenio con el reconocimiento que se merece. Este fruto de la Tierra, habitante de sus entrañas, posee particularidades realmente singulares, como el desarrollo de su ciclo vital, su peculiar recolección llevada a cabo con la ayuda del olfato animal y por encima de todo, sus posibilidades culinarias, gracias a su sabor y su perfume, realmente extraordinarios.
A lo largo de estas páginas descubrirá su historia, las peculiaridades de su naturaleza, la realidad de su cultivo y explotación y lo que es más importante: como utilizarlas en la cocina y un recetario con el que degustarlas.
La trufa negra es una auténtica rareza gastronómica que misteriosamente eclosiona apartada de la luz del sol en un renuncio a la fuente de la vida. Conocida y disfrutada por unos pocos elegidos durante centurias y poco habitual en los recetarios de los últimos tiempos, llega al tercer milenio con el reconocimiento que se merece. Este fruto de la Tierra, habitante de sus entrañas, posee particularidades realmente singulares, como el desarrollo de su ciclo vital, su peculiar recolección llevada a cabo con la ayuda del olfato animal y por encima de todo, sus posibilidades culinarias, gracias a su sabor y su perfume, realmente extraordinarios.
A lo largo de estas páginas descubrirá su historia, las peculiaridades de su naturaleza, la realidad de su cultivo y explotación y lo que es más importante: como utilizarlas en la cocina y un recetario con el que degustarlas.