Tyranea es una novela de ciencia ficción con un trasfondo de ensayo social, en ella se analizan apoyándose en personajes de diferentes razas el comportamiento personal que han significado las colonizaciones, y la respuesta no solo del ser colonizado, sino también el punto de vista del colonizador.
Todo esto va acompañado de la descripción de planetas posibles con civilizaciones diversas, desde las más avanzadas hasta las más primarias, y las razones de cada una para actuar y evolucionar.
La novela va cayendo en espiral hasta la colisión de todos los personajes en un punto geográfico determinado, una vez todos en ese punto las historias se enlazan demostrando que no todo es casualidad, si no la consecución de un destino.
Desde el punto de vista de la narrativa se describe de una manera seudocientífica distintos hitos de la ciencia ficción, como los saltos temporales, las armas del futuro y los dominios de la mente, desde la telepatía hasta la telequinesis, basado todo en el desarrollo personal.
La trama arranca en el planeta Nueva Tyranea, colonizado por el Linaje Colonizador Nevis, en donde las diferentes estatus sociales han marginado a gran parte de la sociedad a vivir bajo tierra en la Ciudad Inferior mientras las clases altas los denominados Hermanos Mayores y Menores viven cómodamente en la superficie dirigidos por los cuarto patriarcas del Sínodo y el Abutendi que son protegidos generación tras generación por el extraño clon Aeternitas.
En este clima de agitación social, uno de los tres personajes principales, Gelem un colono reconvertido a mercenario que vive en la Ciudad Inferior con el resto de marginados, obtiene por casualidad una misteriosa esfera que muchos desean. Junto varios de sus antiguos compañeros deciden descubrir por qué esa esfera es tan importante y quiénes son los que tanto la desean.
En la obra, a través de varios saltos temporales, se presenta el segundo personaje principal Malkia, la última princesa de la extinta civilización Querk que reinaban antes de que llegaran los colonos. Malkia ayudada por sus increíbles poderes y movida por el profundo odio hacia los invasores decide vengar a su raza y para conseguirlo se cruzará en el camino de Gelem que posee la esfera que la ayudará en sus planes.
El último personaje en aparecer es Spri Mentag, el Cabeza de Familia del Linaje Colonizador Nevis afectado por el Síndrome del último día. El Sínodo y el Abutendi le encargan la misión de recuperar la esfera que tiene Gelem pero lo que para Spri iba a ser una fácil misión, se convierte en una persecución por varios planetas que acaba transformando totalmente no solo su cuerpo si no también toda su fe en el sistema. Esta transformación hace que crezca su codicia y se vuelva un sanguinario asesino que quiere derrocar al Sínodo.
Mientras tanto una sociedad secreta denominada El Culto intenta igualmente apoderarse de la esfera. Nadie sabe quiénes son o de donde vienen pero su poder es mayor del que ninguno de los personajes se imaginan.
Todos los personajes se acabarán encontrando en el abandonado planeta Pontífice donde descubrirán tanto los secretos de la esfera como quiénes están detrás de El Culto.
En conclusión Tyranea intenta poner en crisis las ideas preconcebidas sobre las pirámides sociales y los refugios religiosos en los que se basan las sociedades, a la vez que describir mundos futuros donde uno alguna vez soñó vivir.
Todo esto va acompañado de la descripción de planetas posibles con civilizaciones diversas, desde las más avanzadas hasta las más primarias, y las razones de cada una para actuar y evolucionar.
La novela va cayendo en espiral hasta la colisión de todos los personajes en un punto geográfico determinado, una vez todos en ese punto las historias se enlazan demostrando que no todo es casualidad, si no la consecución de un destino.
Desde el punto de vista de la narrativa se describe de una manera seudocientífica distintos hitos de la ciencia ficción, como los saltos temporales, las armas del futuro y los dominios de la mente, desde la telepatía hasta la telequinesis, basado todo en el desarrollo personal.
La trama arranca en el planeta Nueva Tyranea, colonizado por el Linaje Colonizador Nevis, en donde las diferentes estatus sociales han marginado a gran parte de la sociedad a vivir bajo tierra en la Ciudad Inferior mientras las clases altas los denominados Hermanos Mayores y Menores viven cómodamente en la superficie dirigidos por los cuarto patriarcas del Sínodo y el Abutendi que son protegidos generación tras generación por el extraño clon Aeternitas.
En este clima de agitación social, uno de los tres personajes principales, Gelem un colono reconvertido a mercenario que vive en la Ciudad Inferior con el resto de marginados, obtiene por casualidad una misteriosa esfera que muchos desean. Junto varios de sus antiguos compañeros deciden descubrir por qué esa esfera es tan importante y quiénes son los que tanto la desean.
En la obra, a través de varios saltos temporales, se presenta el segundo personaje principal Malkia, la última princesa de la extinta civilización Querk que reinaban antes de que llegaran los colonos. Malkia ayudada por sus increíbles poderes y movida por el profundo odio hacia los invasores decide vengar a su raza y para conseguirlo se cruzará en el camino de Gelem que posee la esfera que la ayudará en sus planes.
El último personaje en aparecer es Spri Mentag, el Cabeza de Familia del Linaje Colonizador Nevis afectado por el Síndrome del último día. El Sínodo y el Abutendi le encargan la misión de recuperar la esfera que tiene Gelem pero lo que para Spri iba a ser una fácil misión, se convierte en una persecución por varios planetas que acaba transformando totalmente no solo su cuerpo si no también toda su fe en el sistema. Esta transformación hace que crezca su codicia y se vuelva un sanguinario asesino que quiere derrocar al Sínodo.
Mientras tanto una sociedad secreta denominada El Culto intenta igualmente apoderarse de la esfera. Nadie sabe quiénes son o de donde vienen pero su poder es mayor del que ninguno de los personajes se imaginan.
Todos los personajes se acabarán encontrando en el abandonado planeta Pontífice donde descubrirán tanto los secretos de la esfera como quiénes están detrás de El Culto.
En conclusión Tyranea intenta poner en crisis las ideas preconcebidas sobre las pirámides sociales y los refugios religiosos en los que se basan las sociedades, a la vez que describir mundos futuros donde uno alguna vez soñó vivir.
